Ayala pierde la cuestión de confianza vinculada a la aprobación inicial de los presupuestos de Burgos para 2025

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La alcaldesa de Burgos, Cristina Ayala, del Partido Popular, perdió hoy la cuestión de confianza vinculada a la aprobación inicial de los presupuestos municipales para 2025. En el Pleno extraordinario celebrado este jueves, Ayala obtuvo únicamente el respaldo de los 11 concejales de su grupo frente a los 16 votos en contra de la oposición: cuatro de Vox, su ex socio de gobierno, y 12 del Partido Socialista.

El rechazo de Vox a los presupuestos, ya evidenciado en el Pleno del pasado viernes, marcó la ruptura del pacto entre ambas formaciones y forzó a la regidora a someterse a esta cuestión de confianza. «Hoy pierdo la confianza del Pleno, pero gana Burgos y los burgaleses porque aprobar los presupuestos de 2025 es mi único objetivo», declaró Ayala tras la votación.

La alcaldesa explicó que la Ley Orgánica del Régimen Electoral General (LOREG) permite a los alcaldes recurrir a este mecanismo cuando existe un bloqueo en la aprobación presupuestaria y aunque este trámite implica poner su cargo a disposición de una posible moción de censura, Ayala señaló que lo prioritario es garantizar el funcionamiento de la ciudad a través de los presupuestos. Lo cierto es que esa moción de censura parece imposible debido a las diferencias existentes entre los otros dos partidos representados en el Ayuntamiento, Vox y PSOE, lo que permitirá la aprobación inicial de las cuentas para 2025.

Ante esta situación, Ayala pidió en una rueda de prensa posterior que ambos grupos oficialicen su decisión por escrito para acelerar los trámites y evitar esperar un mes para la aplicación de los presupuestos.

Con un equipo de gobierno reducido a 11 concejales del PP, Ayala anticipó un periodo de negociaciones para sacar adelante cada proyecto. “La idea es pactar, ya sea proyecto a proyecto o en pequeños grupos, sin someterlos a condiciones previas de Vox ni del PSOE”, subrayó.

El presupuesto de 2025, añadió, contempla una modificación presupuestaria de cerca de 30 millones de euros, pero dejó claro que no se negociará «en bloque», como exige el PSOE, ni se excluirá a Vox, pese a las exigencias socialistas.

Desde Vox, el portavoz Fernando Martínez-Acitores afirmó que harán una oposición «constructiva pero contundente», priorizando las políticas de familia, seguridad e infraestructuras que defendieron en campaña electoral. «Nos vamos a la oposición con la satisfacción del deber cumplido», señaló el exvicealcalde.

Por su parte, el portavoz socialista Daniel de la Rosa anunció una oposición “inflexible” y culpó a Ayala de haber conducido al Ayuntamiento a “la mayor crisis de gobierno en dos décadas” por su «prepotencia y falta de diálogo». De la Rosa pidió la dimisión de la regidora para «dejar paso al siguiente» y condicionó posibles acuerdos a que el PP «aisle a la extrema derecha».

Ayala solicitó un informe al secretario general del Ayuntamiento para definir el procedimiento que garantice la aprobación definitiva de los presupuestos.

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