El Plan de Choque de limpieza actúa con especial incidencia en grafitis y chicles
El concejal de Medio Ambiente y Sanidad, Carlos Niño, ha proporcionado un resumen de la iniciativa conjunta con URBASER, que se puso en marcha en agosto pasado. Niño ha destacado que la campaña de limpieza se llevó a cabo con la intención del Equipo de Gobierno de mejorar la higiene en Burgos. Subrayó que el proceso de limpieza urbana es un proyecto a largo plazo y que no se deben esperar cambios drásticos de la noche a la mañana.
Aunque el plan de choque concluyó a finales de noviembre, se continuaron realizando actividades de desbroce. Entre las técnicas empleadas se encuentran el soplado de aceras, la eliminación de pintadas y chicles. La empresa utilizó diversas herramientas, como dos desbrozadoras, un camión cisterna y dos limpiadoras de aceras, entre otras.
Carlos Niño hizo un llamado a la concienciación respecto a los chicles, ya que destacó que retirarlos consume mucho tiempo y recursos. Se llevaron a cabo jornadas de trabajo de manera continua, incluso en horarios nocturnos ajustados para no molestar a los vecinos. El concejal afirmó que estas labores de limpieza representaron un esfuerzo constante y positivo.
Se contempla la implementación de un nuevo plan de choque, ya sea de forma general o específica, dependiendo de las necesidades, en coordinación con URBASER.
Niño señaló que se intensificó la limpieza en áreas específicas donde se observó mayor suciedad, aunque no especificó las zonas. Además, se ha tenido que repetir el desbroce en algunos lugares.
El concejal abordó el tema de los grafitis, describiéndolos como un desafío continuo. Explicó que solo pueden limpiarlos de oficio en edificios públicos y alentó a los propietarios de propiedades privadas a solicitar la limpieza. Se ha intentado fomentar la colaboración con los propietarios, destacó Niño, y se han entablado conversaciones con aquellos que han mostrado interés.