Progresan las obras de construcción del centro de conservación de Olmillos de Sasamón, en la autovía A-231
El viceconsejero de Infraestructuras y Emergencias de la Junta de Castilla y León, José Luis Sanz Merino, ha visitado los avances del centro, que dará servicio a la carretera entre Carrión de los Condes y Burgos. El presupuesto total de adjudicación, junto con la rehabilitación de 57.472 metros cuadrados de pavimento y la instalación de cámaras de vigilancia en la vía, asciende a 7.700.095,53 euros.
Las obras del centro de conservación de Olmillos de Sasamón, situado en el kilómetro 134 de la autovía A-231, continúan acorde al proyecto consensuado en 2019 por la Junta de Castilla y León. El viceconsejero de Infraestructuras y Emergencias de la Consejería de Fomento y Medio Ambiente, José Luis Sanz Merino, y el delegado territorial, Roberto Saiz Alonso, han visitado el espacio que dará cobertura a la zona de la carretera entre Carrión de los Condes y Burgos.
El importe total del contrato suscrito por la administración autonómica es de 7.700.095,53 euros, y la parte del mismo que corresponde al centro es de 1.224.624 euros. Dentro de este importe se incluye el presupuesto para la construcción del centro de conservación, además de la instalación de ocho cámaras de vigilancia y la mejora de 57.472 metros cuadrados de pavimento. Asimismo, hace dos años se renovaron los contratos para estas actuaciones, de 48 meses de duración, siendo la empresa adjudicataria de este tramo Tecnología de Firmes, que posteriormente cedió la obra a la compañía Conservación de Viales.
La autovía A-231, comúnmente conocida como la del Camino de Santiago, tiene un total de 157 kilómetros que se dividen para su conservación y mantenimiento en dos tramos: León-Carrión de los Condes y Carrión de los Condes Burgos. Para cada vía, la Junta de Castilla y León proyectó un centro de conservación que diera cobertura a cada tramo, además de todas las operaciones de conservación y mantenimiento de la vialidad ordinaria e invernal que la carretera necesitara. En el caso del tramo Carrión de los Condes-Burgos, este se desarrolla desde el punto kilométrico 85+480 hasta el 157+100.
La ejecución de este centro de conservación en la localidad burgalesa de Olmillos de Sasamón, que tiene un presupuesto de 1.224.624 euros, cuenta con un edificio para oficinas y servicios de personal, una nave de almacenamiento de vehículos, acopios y herramientas y un conjunto formado por almacén de fundentes y los servicios generales del centro además de la urbanización de parcelas donde se ubicarán las instalaciones.
También se instalará un sistema de vigilancia mediante ocho cámaras a lo largo de todo el recorrido que permitirá conocer en tiempo real la incidencias y situación de la autovía todo para mejora si cabe aún más la seguridad vial.
Los trabajos para la construcción del centro de Olmillos de Sasamón se dividen en cuatro unidades: obras de urbanización del terreno, edificio de oficinas y servicios de personal, nave de almacenamiento de vehículos, acopios y herramientas y el conjunto formado por el almacén de fundentes y los servicios generales del centro. La superficie que se construirá en toda la parcela asciende a los 2.207,20 metros cuadrados, siendo 1.989,90 metros cuadrados el área útil.
El edificio dispondrá de dos plantas, con una altura libre mínima de 2,70 metros. La estancia baja estará destinada a servicios de personal y control de accesos; mientras que la primera planta albergará el área administrativa del centro. En total, será un edificio con 524,50 metros cuadrados y una superficie útil de 475,80.
Asimismo, la nave de almacenamiento de vehículos, acopios y herramientas, que se instalará de modo contiguo al edificio principal, cuenta con una superficie de 1.160 metros cuadrados construidos, 1.025 útiles. Por último, el almacén de fundentes y los servicios generales del centro, instalados en una nave abierta de hormigón blanco destinada al almacenamiento de sal de mina y marina, contará con una superficie útil de 459,1 metros cuadrados, de un total de 522,40 construidos.
Función de la autovía del Camino de Santiago
La autovía A-231, que une las capitales castellanoleonesas de Burgos y León, ha cumplido más de 20 años desde su construcción. El trazado total de la misma, de 157 kilómetros, supuso una inversión de más de 395.000.000 euros.
La autovía del Camino de Santiago se caracteriza por ser una vía de alta capacidad que permite canalizar todos los tráficos hacia el noroeste español, en concreto, hacia Asturias con la autopista A-66 y hacia Galicia; facilita las comunicaciones con Santander; optimiza las comunicaciones por el Este al conectar con la Autovía de Castilla en Burgos capital, lo que amplía las relaciones socioeconómicas con el noreste español y Francia. Finalmente, esta autovía comunica en León con la Autovía de Plata, lo que favorece las comunicaciones de dicha área con el sur de España.
Esta vía, que conecta dos capitales de Castilla y León y contribuye a la vertebración del norte de la comunidad, cuenta, en sus 157 kilómetros, con 20 enlaces, 130 puentes, 37 pontones, 932 pequeñas obras de fábrica, 52 kilómetros de carretera entre ramales y enlaces, 500 kilómetros de barreras de contención de vehículos, 315 de valla de cerramiento, 782 de marcas viales, 2659 señales de circulación, 394 carteles, pórticos y banderolas, 85.000 elementos de balizamiento, 265 kilómetros de cunetas revestidas de hormigón y 66 kilómetros de bordillos.
Son más de tres millones de vehículos los que circulan por la autovía A-231 al año, de los cuales casi 700.000 son camiones. Sin embargo, la vía del Camino de Santiago está considerada como una de las autovías más seguras y con menos siniestralidad de España. De hecho, el índice de peligrosidad en la red de alta capacidad del Estado es de 7,8 y el suyo es de 5,24 (según datos de 2019).