Belorado continúa trabajando en la repoblación

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Esta mañana se presentaba en Belorado el Modelo de desarrollo de la España vaciada, organizado por Burgos Enraíza y que ha contado con la colaboración de la Concejalía de Repoblación e Integración del Ayuntamiento de Belorado y FAS Tirón.

José María García, concejal de Repoblación e Integración, recordaba que se creó la concejalía de Repoblación «que de momento es la única».  En el caso de Belorado, «el primer año de legislatura perdimos sólo un habitante pero bajamos mucho la media y en este momento ya estamos 9 por encima. Unos treinta trabajadores contratados en la empresa minera se marcharon,  pero nos hemos recuperado esos treinta y nueve más. Es impresionante, ya tenemos unas cuantas familias arraigadas y estamos esperando que nazca el primer niño de la repoblación».

Jornada en Belorado
Jornada en Belorado

«Comenzamos la legislatura con 1801 habitantes, bajamos a 1800 el año siguiente y perdimos bastantes más pero hemos recuperado los que se fueron  nueve más, y estamos ahora en 1809 a fecha de 30 de junio». Ahora están a la espera de que nazca el primer niño que va a nacer de la repoblación, de una familia que llegó de Palma de Mallorca y que ayer fueron al hospital y se han quedado ya, así que esperando con ilusión».

En la jordana de hoy, se ha contado la historia del pueblo «como lo encontramos y lo que estamos haciendo para recuperar población. Justo empezamos con el tema de la repoblación el lunes 16 de marzo  de  2020 y se cerró el día 15. Tuvimos que retrasarlo, en verano hubo un repunte importante porque conseguimos traer en poco tiempo y que se quedasen 5 familias, unos se han quedado, otros se han ido, pero en estos momentos ya hay 10 familias, 28 personas. Estamos recuperando gente que se marchó del pueblo y han vuelto. Estamos trabajando con el proyecto Arraigo, con muchas empresas y asociaciones poblacionales».

José Mari García recordaba que han venido varios de Canarias que al final no han cuajado, tenemos una familia argentina, una familia venezolana con 5 niños que fueron los primeros que vinieron, han venido de Granada, de Palma de Mallorca, de Madrid, de Bilbao, una familia Peruana con 3 niños y están esperando el cuarto, que va a ser el segundo niño de la repoblación. Importante, apunta, es «que vengan familias, que vengan con niños y que nazcan niños, que se afinquen, alguna ha llegado que no ha cuajado una que se separó y ahora ella que está en Madrid quiere venir con los niños pero el problema que tiene es que tiene que cuidar ella sola a las niñas y está a media jornada y lo tenía complicado. «Me ha comentado que en cuanto encontremos algo para ella se viene porque las niñas estaban encantadas aquí».

La concejalía de Repoblación e integración se pone a disposición de los que quieran venir. «Tenemos un grupo de acogida de voluntarios que proceden de Cruz Roja,  de gente de asociaciones, estamos la mitad del grupo municipal en el grupo de acogida y algunos repobladores que ya están aquí, revisamos todos los pisos y casas para intentar encontrar alquileres en condiciones, porque cuando empezamos estaban entre 400 a 450 euros de alquiler y ahora ya los encontramos por 250 euros,  a pesar del miedo que tiene la gente por alquilar, que no hay manera d quitárselo. Hacemos reuniones para ellos, para que se enteren de este tema y vean que tiene detrás el filtro del proyecto Arraigo. También miramos locales tierras, fincas , les acompañamos a buscar trabajo…».

«La última familia que vino hace tres semanas son de Murcia ya tiene un piso con un alquiler a muy buen precio, creo que es el mejor que he visto y ya están trabajando  los dos,  además quieren dejar el trabajo porque quieren emprender» apunta José Mari García.

El Concejal  de Repoblación e Integración recordaba su historia. «Yo soy también un emigrante, además por partida doble, porque es la tercera vez.  Con tres años y medio, salí de una aldeíta de Galicia, mis padres me llevaron a un pueblo que se llama Bilbao, la gente hablaba distinto a mí, aunque todos hablaban castellano, entonces no se hablaba euskera, pero yo hablaba gallego. A  pesar de esto, me integré perfectamente, mi vida laboral la desarrollé en el País Vasco, aunque mi idea era volver a mi aldea», pero en una visita a un familiar de su mujer, se cruzó Belorado, y pensó vivir al jubilarse medio año en Belorado y otro medio en Galicia, pero «no tengo tiempo para ir a Galicia».

Belorado creó esta concejalía, la primera que se creaba en este área en España. Participaron en la manifestación del 31 de marzo de  2019 «y aquello nos cambió, se llenó un autobús, y de aquel día hay una foto significativa en la que estamos el que hoy es el alcalde, Álvaro Eguiluz , el teniente de alcalde, Rubén Contreras , y yo. Y Ese momento lo cambió todo, de allí surgió Vecinos x Belorado».

Juan José y Samara, los últimos repobladores

Juan José
Juan José, el último «repoblador»

Gracias al proyecto Arraigo y a la Concejalía de Repoblación,  Juan José y Samara, una pareja murciana llegó a Belorado. Han sido los últimos «repobladores»  en llegar a la localidad. Lo hicieron el pasado mes de junio y «estamos encantados».  Tal es así, que ya están mirando a ver cómo pueden traer a la familia y los amigos que les puede interesar.

La apuesta por Belorado «fue un poco de rebote». Esta pareja sopesaba la idea de la comarca del Gállego, en Huesca, pero la idea se alargó. Desde el  proyecto Arraigo, le ofrecieron  otras posibilidades,  una de ellas, Belorado. «Me atrajo porque cuenta con todos los servicios, es pequeño pero a la vez tiene de todo, es capital de la comarca, tiene naturaleza … y la duda llegaba cuando ves todo esto, pero se une a un proyecto de repoblación y te preguntas porqué buscan repobladores».

Al llegar a Belorado hablamos con José Marí García, nos enseñó el pueblo, nos mostró lo bueno y lo malo, y desde el principio nos llenó, nos enamoramos de Belorado, y tanto mi mujer como yo lo tuvimos claro, Belorado era el lugar».

Esta pareja provienen de Molina de Segura, una ciudad con cerca de 100.000 habitantes y mucho calor, «nos gusta el frío y la naturaleza, y pensamos ir a vivir al norte, pero en un lugar en el que conocer a los vecinos, no como en una ciudad que apenas si conoces». La pandemia aceleró la decisión, al principio un «vamos a probar, que se convirtió en aquí nos quedamos gracias a la ayuda de José Mari y de la Concejalía de Repoblación e Integración. Ahora ya podemos llamarlo hogar, Belorado es nuestro pueblo».

De Belorado les gustan todos los servicios, la naturaleza, las posibilidades de vivir y disfrutar de este entorno natural.

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