Constituidas las Mesas de Coordinación Policial contra la violencia de género de Burgos, Miranda de Ebro y Aranda de Duero
La provincia de Burgos cuenta actualmente con 599 casos activos de mujeres con atención por parte de Fuerzas y Cuerpos de Seguridad. A partir de ahora las policías locales asumirán progresivamente la vigilancia de una parte de los casos valorados con riesgo bajo y riesgo no apreciado
El subdelegado del Gobierno en Burgos, Pedro de la Fuente, ha asistido este miércoles a la reunión con los ayuntamientos de Burgos, Miranda de Ebro y Aranda de Duero en la que se han constituido las Mesas de Coordinación Policial contra la violencia de género tras la firma el pasado mes de noviembre de la incorporación de estos tres municipios al Sistema Integral de Violencia de Género (VioGen).
El encuentro, que se ha desarrollado de forma telemática, ha contado con la presencia de la jefa de la Unidad contra la Violencia sobre la Mujer de la Subdelegación del Gobierno, Begoña Fernández, la concejala de Seguridad Ciudadana del Ayuntamiento de Burgos, Blanca Carpintero, el concejal de Seguridad Ciudadana y Servicios Sociales de Miranda de Ebro, Pablo Gómez, la técnica del Equipo de Mujer del Ayuntamiento de Aranda, y responsables tanto de la Policía Nacional como de las Policías Locales de las tres localidades.
La reunión, que se convocará de forma semestral, ha servido para hacer un seguimiento de los pasos dados desde la firma de los protocolos. También se ha avanzado en la distribución de los casos activos entre la Policía Nacional y la Local y en la formación necesaria para los policías locales de cara a desarrollar las funciones encomendadas. Pedro de la Fuente ha recalcado que se trata de «fortalecer la cooperación y la colaboración entre las fuerzas y cuerpos de seguridad, optimizar los efectivos de seguridad y mejorar la protección y la seguridad de las mujeres que sufren esta tragedia».
La provincia de Burgos cuenta actualmente con 599 casos activos de mujeres con atención por parte de Fuerzas y Cuerpos de Seguridad, la inmensa mayoría de ellos de riesgo bajo y no apreciado. Las policías locales, a través de este acuerdo, tendrán acceso a la base de datos de carácter nacional que depende del Ministerio del Interior y que recoge información de carácter policial, judicial y penitenciario de todos los casos de violencia de género denunciados. Además, llevarán a cabo funciones que hasta ahora eran desarrolladas de forma exclusiva por la Policía Nacional, tales como las evaluaciones del riesgo y la ejecución de las medidas de protección policial en el propio entorno de las mujeres.
A partir de ahora las policías locales asumirán progresivamente la vigilancia de una parte de los casos valorados con riesgo bajo y riesgo no apreciado. Cuando se eleve el nivel de riesgo, la protección correrá siempre a cargo de la Policía Nacional.