Arturo Pérez:» Estamos vaciados hasta de coronavirus»
El Ayuntamiento de Oña tiene una partida para emprendedores que destinará a ayudas a empresarios y autónomos y que se repartirá estudiando «caso por caso».
La villa milenaria de Oña, se mantiene sin casos de coronavirus, al igual que sus pedanías. Su alcalde, Arturo Pérez, recuerda que se cumple la cuarentena, «aunque siempre hay alguno que se la salta» pero en términos generales, los vecinos se comportan, «hay conciencia de la situación». El único problema que se plantea es el acceso a las huertas, algo que el alcalde espera que se pueda hacer en breve.
Ante la escasez de mascarillas, un grupo de ocho voluntarias se ofrecieron para confeccionarlas en casa, y el Ayuntamiento las facilitó el material para su confección y poder dar a los vecinos que no podían conseguirlas, sobre todo, al principio a los más vulnerables o reparto en supermercados. Desde la Subdelegación del Gobierno le llegaron 400 mascarillas más, «la única administración que nos ha enviado, aunque las hemos pedido también a la Junta y a la Diputación». Arturo Pérez ha podido comprar más mascarillas que el alguacil, algún concejal y los bomberos voluntarios están repartiendo en Oña y sus pedanías, dos por vecino incluidos los niños. Pérez ha hecho más pedidos, «llegan a cuentagotas», pero en cuanto lleguen, procederán a su reparto.
Las desinfecciones se han hecho desde el primer momento con los bomberos voluntarios cada dos o tres días con el camión. Después y gracias a unos difusores que se instalaron se pudo llegar a más lugares, también a las pedanías. Las zonas de contenedores, las de más tránsito como farmacia, supermercados, tiendas de alimentación o entradas a viviendas, se desinfectan además con un bactericida de forma manual con sulfatadores manuales y automáticos, todo desde el primer momento.
No ha habido desabastecimiento «excepto de mascarillas». El resto de comercio no ha tenido problemas y desde el primer bando que se publicó a raíz del estado de alarma, unos voluntarios se pusieron a disposición de los vecinos, con una serie de teléfonos incluido el personal del alcalde, 24 horas al día para que los vecinos mayores o los que lo necesitaran, pudieran transmitir sus necesidades, como la compra o medicamentos, y estos voluntarios se lo llevan a casa, también a las pedanías. Arturo Pérez también se comunica con los vecinos por WhastApp para conocer de primera mano cómo es su estado y darles a conocer los bandos y comunicados municipales.
La localidad cuenta con dos residencias de mayores que no tienen ningún caso, es más, el alcalde recuerda que se han realizado en ellas unos 400 test y todos han resultado negativos.
La Guardia Civil pasa muy a menudo, más cuando Oña tiene Cuartel, controlando en todo momento que nadie incumpla lo establecido.
Se han suspendido muchos eventos y fiestas, comenzando por el Festival de Magia que se hubiera celebrado el 25 y 26 de abril, las obras de teatro de los Circuitos Escénicos, las fiestas de San Íñigo y San Juan, aún no está decidido, pero con toda probabilidad que se suspenderán, así como todos los eventos y la programación cultural de la villa.
En cuanto al Cronicón, lo está valorando la Junta Directiva aunque todo va a depender de la desescalada, ya que no sólo es el público, sino que como indica Arturo Pérez, también son los actores, porque si tienen que cumplir las normas como la de los dos metros de distancia, se complica mucho la representación. Sacar el Cronicón adelante supone un gran gasto, y si el aforo disminuye, también lo hacen los gastos.
El alcalde se refiere también a negocios como bares y restaurantes, porque «no es el cuándo, es el cómo» y recuerda que hay establecimientos, sobre todo restaurantes, que tienen aforos de 20 o 30 comensales y «quizás no les interese ni abrir la puerta».
En cuanto a las obras municipales, Arturo Pérez reconoce que esta situación ha sido propicia para comenzar algunas que de otro modo hubieran causado trastornos entre los vecinos. La situación de confinamiento y las restricciones de movilidad hace que sea más fácil realizarlas, como las obras de adecuación de la arteria principal de la localidad, que ahora originará algún trastorno, pero mucho menos que en circunstancias normales.
Desde el Ayuntamiento, hace años que se cuenta en los presupuestos con una línea de financiación a emprendedores, y que en esta situación, se va a dotar de más presupuesto gracias a partidas que no se van a poder gastar, como algunas partidas de fiestas y otras actividades que no se van a poder contratar. Esta partida destinada a emprendedores, se va a repartir en función de los gastos en impuestos municipales que gestiona el propio Ayuntamiento a empresas y autónomos de forma proporcional «pero siempre estudiando caso por caso». Tampoco se cobrarán los impuestos de terrazas. El estudio ya se está haciendo para valorar todas las circunstancias.
Otra medida que han tomado es no cobrar la renta, luz y otros gastos, a los inquilinos que están en pisos de «ayuda a las familias» porque «hasta donde podamos llegar, lo estamos haciendo» reitera Arturo Pérez.
El alcalde de Oña espera que los vecinos se sigan comportando como lo han hecho hasta ahora, les pide paciencia porque el final siempre llega y seguro que «poco a poco nos dan un poco de suelta». A las administraciones, les pide que ya que las zonas rurales son las «zonas vacías», y que es difícil legislar para ellas, que tengan un poco más de sensibilidad porque seguimos siendo la «España vacía» y que «en estos pueblos sin casos, podrían tener un poco más de sensibilidad con ellos, y tener alguna ventajilla, porque estamos vaciados hasta de coronavirus».