La Junta presenta el Plan Estival 2018 que recoge recomendaciones para proteger la salud
El delegado territorial de Burgos, Baudilio Fernández-Mardomingo, presenta las actuaciones de refuerzo que la Junta de Castilla y León va a llevar a cabo en la época estival para garantizar la salud pública, así como recomendaciones y consejos para evitar problemas relacionados con esta estación.
A lo largo del año, la Junta de Castilla y León en el marco de sus competencias en salud pública, desarrolla un intenso trabajo para proteger la salud de las personas. De cara al verano, en el período comprendido entre el 1 de Junio al 15 de septiembre, intensifica y refuerza aún más estas intervenciones, ampliando los ámbitos de actuación en materia de vigilancia, control e inspección alimentaria y ambiental, cuyo fin último es mantener el más adecuado y efectivo nivel de protección para la salud de los ciudadanos.
La Dirección General de Salud Pública ha plasmado esa mayor actividad en el llamado ´Plan Estival 2018´, con el fin de recordar a los ciudadanos la importancia de adoptar medidas preventivas para proteger la salud. La Junta además actúa reforzando las inspecciones y controles en restaurantes, zonas de baño públicas, campamentos, albergues y en el tema de vacunación para los viajeros internacionales.
Altas temperaturas
Los meses de verano constituyen una época especialmente crítica debido a las altas temperaturas. El calor afecta a la salud, tanto por la exposición al sol como por las propias temperaturas, y, es por encima de 22 grados de mínima cuando mayor repercusión tiene en nuestro organismo. Desde 2017, el Plan Nacional recoge la mortalidad por la exposición al calor natural. Por esta razón, es fundamental conocer la información y consejos necesarios ante la exposición al sol, olas de calor y niveles de alerta que podemos encontrar en el portal sanitario de la Junta de Castilla y León.
El Plan Estival 2018 recoge entre sus acciones la comunicación con cinco días de antelación de las previsiones de temperaturas altas para minimizar el impacto de las olas de calor en la población especialmente susceptible (niños, ancianos, enfermos crónicos). En cuanto a las recomendaciones, evitar salir en las horas centrales del día y beber para hidratarse son las principales.
Aguas de recreo
Uno de los aspectos donde El Plan incide es en la vigilancia, control e inspección de las aguas de recreo. Burgos tiene 1 zona de baño natural; Arija, en el pantano del Ebro, en la que se realizó el año pasado 9 controles analíticos, además de inspeccionar 94 piscinas públicas, al aire libre y climatizadas, que se sometieron a revisiones previas por parte de los técnicos antes de la apertura de las instalaciones al público. En total, los inspectores de Sanidad realizaron 425 visitas.
El agua de la zona de Arija se ha calificado como excelente.
Infecciones e intoxicaciones alimentarias
Directamente relacionado con el calor pero también con las prácticas en la manipulación de alimentos, la Consejería de Sanidad recuerda la importancia de prevenir brotes de enfermedades transmitidas por alimentos.
Los procedimientos de control e inspección de procesos y alimentos han demostrado resultar muy eficaces en la prevención de muchos de estos problemas (a lo largo del año 2017 se han realizado un total de 19.799 inspecciones a 6.334 establecimientos e industrias).
Dado que la mayoría de los brotes de infección e intoxicación alimentaria se producen en el ámbito familiar, la administración recomienda unos consejos prácticos para la preparación higiénica de los alimentos en los domicilios. Las recomendaciones más importantes pasan por respetar la cadena de frío, cocinar adecuadamente los alimentos, extremar la higiene de quien los prepara y cuidar el agua de bebida.
En 2017, fueron 209 personas las afectadas (15 hospitalizados) por 7 brotes de intoxicaciones alimentarias en Burgos, de los que 3 fueron brotes familiares.
Actividades al aire libre
Otra de las áreas de intervención del Plan se centra en el control sanitario de albergues y campamentos. En los 63 albergues en el Camino de Santiago, se realizan inspecciones periódicas para la detención de plagas (chinches, garrapatas, etc.); antes y durante el funcionamiento de estas instalaciones. En dicha labor, se tiene en cuenta diversos aspectos como, por ejemplo, la ubicación del mismo, el número de asistentes o las condiciones de elaboración de las comidas, entre otros, poniendo especial énfasis en el control de agua potable y alimentos.
Plan de vacunaciones Internacionales
Otro ámbito de actuación para la campaña de este verano es el referido a los viajeros que vayan a salir a destinos internacionales en los que es necesaria la aplicación de medidas sanitarias preventivas, como la vacunación o profilaxis, además de información al respecto.
En 2017, el Centro de Vacunación Internacional de Burgos, que se encuentra en el Servicio Territorial de Sanidad de la Delegación, en el paseo Sierra de Atapuerca 4 (947280107), atendió a un total de 2.045 viajeros y suministró 2.106 vacunas. La mayor parte de las actuaciones se concentran en vacunación frente a la fiebre amarilla, obligatoria en muchos países (569), Hepatitis A (1037) y profilaxis antipalúdica. Turismo 1298; Visita a familiares 313; Trabajo 180; Cooperación 164.
Plan de prevención de la legionelosis
La Junta desarrolla, también, anualmente un protocolo con el objetivo de prevenir la aparición de la legionelosis, enfermedad que cursa como una neumonía grave. Las actuaciones que se realizan incluyen inspecciones a centros de riesgo con torres de refrigeración o condensadores evaporativos. Además, se realizan controles del agua sanitaria en hospitales, residencias de mayores, hoteles, balnearios y spas.
Durante 2017 se realizaron 345 visitas de inspección a estos establecimientos y se tomaron 76 muestras, siendo positivas 16, en las cuales se adoptaron las medidas correctoras correspondientes. No hubo ningún brote.