Las ayudas de urgente necesidad en Burgos recaen mayoritariamente en mujeres solas y personas migrantes

La mayoría de quienes solicitaron las ayudas de urgente necesidad en Burgos durante 2024 fueron mujeres solas, muchas de ellas con hijos a su cargo, y personas de origen migrante. Así lo dio a conocer Mila del Campo, presidenta de la Gerencia Municipal de Servicios Sociales del Ayuntamiento de Burgos, al presentar el balance anual de estas prestaciones.
Durante el pasado año, se tramitaron un total de 936 solicitudes, de las cuales se concedieron 770, lo que supone un 82,2 % del total, un descenso del 5,2 % respecto al año anterior. El Ayuntamiento destinó a estas ayudas una partida de 636.296,5 euros, según detalló Del Campo.
Los datos reflejan que el 67,48 % de las personas beneficiarias fueron mujeres en situación de monoparentalidad o viviendo solas. Además, el 54 % de los solicitantes eran personas migrantes, una cifra que ha aumentado notablemente con respecto a 2023, cuando representaban el 41,3 %.
Del Campo también alertó sobre el carácter continuado de esta problemática, ya que el 40 % de los solicitantes ya había requerido este tipo de ayuda en años anteriores, lo que evidencia una situación que, en sus palabras, «se ha cronificado».
Una parte significativa de los casos fue canalizada hacia organizaciones sociales como Cáritas Diocesana (en el 54 % de los casos), Cruz Roja o el Banco de Alimentos. En cuanto a la distribución territorial, los centros de acción social de Vadillos, San Pedro y San Felices, y San Julián fueron los que mayor número de expedientes gestionaron.
Las ayudas, que tienen un carácter excepcional y de pago único, están destinadas a cubrir necesidades urgentes relacionadas con la alimentación, la higiene, el alojamiento o la salud. De hecho, la mayor parte del presupuesto se destinó a cubrir gastos básicos de alimentación y cuidados personales (570 ayudas por un total de 373.138 euros), seguido por ayudas para alojamiento temporal (294 ayudas con un coste de 203.487 euros).
El importe máximo otorgado por persona alcanzó los 4.200 euros, mientras que la media se situó en 826,32 euros. Además, se destinaron 44.604 euros para alojamientos alternativos y 9.268 euros en el ámbito sanitario.