Cristina Ayala: “La rectificación sobre las ayudas a las ONGs era una decisión de convicción”
La alcaldesa de Burgos, Cristina Ayala, ha defendido hoy la decisión de incluir las ayudas a las organizaciones que trabajan con inmigrantes —Burgos Acoge, ACCEM y Atalaya Intercultural— en el borrador de los presupuestos municipales de 2025. Según Ayala, se trató de “una decisión que en convicción teníamos que tomar”, asumiendo las posibles consecuencias, incluida la opción de someterse a una cuestión de confianza si las cuentas no son aprobadas este viernes, 22 de noviembre, en el Pleno municipal.
Ayala hizo estas declaraciones durante la inauguración del supermercado mayorista Top Cash en el polígono industrial de Villalonquéjar, donde afirmó que “la ciudad no se puede permitir tirar por la borda un año y medio de trabajo” relacionado con el desarrollo de un presupuesto que calificó como “un proyecto de ciudad espléndido, de 250 millones de euros”.
A preguntas de los periodistas, Ayala señaló que un posible gobierno en minoría dependerá de la postura final del grupo Vox, socio del PP en el equipo de gobierno: “Ese escenario nos lo plantearemos a partir del viernes, en función de cuál sea la respuesta definitiva de Vox respecto a la aprobación de un presupuesto que ellos han trabajado por nosotros”.
Animó a Vox a reconsiderar su postura, afirmando que “todavía están a tiempo” de apoyar los presupuestos que ambas formaciones han elaborado conjuntamente durante el último año y medio.
En cuanto al ofrecimiento del portavoz socialista Daniel de la Rosa para aprobar los presupuestos con dos exigencias —la recuperación de las ayudas a cooperación al desarrollo y el convenio con la Asociación Provincial de Recuperación de la Memoria Histórica—, Ayala descartó, por el momento, esta opción. “No es un escenario que nos planteamos. Queremos aprobar el presupuesto en el que llevamos trabajando un año y medio y que va a traer muy buenos resultados para la ciudad”, insistió.
Ayala explicó que el Grupo Municipal Popular decidió restituir las ayudas a las ONGs por una cuestión de principios. “Por un tema de convicción teníamos que hacerlo. Dijimos que eso era para nosotros una cuestión de convicción y que lo llevaríamos hasta las consecuencias que fueran necesarias”, reiteró.
Además, subrayó que el proyecto de ciudad y la estabilidad de Burgos fueron concebidos con Vox, y que los presupuestos son una herramienta clave para su desarrollo.
La jornada estuvo marcada también por la aparición de pintadas racistas en las sedes de ONGs como Burgos Acoge, ACCEM, Atalaya Intercultural y Cáritas Diocesana. Mensajes como “España lo primero”, “Más Valencia y menos Nigeria” y otros insultos, junto a símbolos nazis y fascistas, cubrieron paredes y ventanales.
Ayala calificó estos actos de “tremendos” y defendió la restitución de las ayudas a las ONGs. “Estamos convencidos de que la inmigración suma. Cualquier discurso racista o xenófobo hay que descartarlo de la escena pública, y desde luego, desde mi grupo, lo haremos con toda la fuerza que nos acompaña, que es la fuerza de la razón”, sentenció.
El futuro de los presupuestos y del pacto entre PP y Vox se definirá en la sesión plenaria del próximo viernes, en un contexto de tensiones políticas y sociales que marcan el debate en la ciudad.
