El PP presenta quince medias para dar futuro y vida al campo

El Partido Popular va a presentar un plan de choque que incluye quince medidas esenciales para «dar futuro y vida al campo», abordando diversas problemáticas y que son similares a las reclamaciones del sector.

El diputado por Burgos, Ángel Ibáñez ha señalado que se va instar a que estas medidas sean adoptadas «lo antes posible para hacer frente a la difícil situación que enfrentan los agricultores y ganaderos» y ha recordado que estas peticiones son las que ya se han desarrollado en diversos foros y con la Unión Europea.

En primer lugar, quieren reivindicar el carácter estratégico del sistema agroalimentario español por su aportación en la economía y vida en el medio rural y ha recordado que los agricultores «han perdido 3000 millones en renta agraria», por otro lado, quieren que se refuerce a España como un país atractivo «por su calidad en los alimentos y productos específicos» y que se garantice la producción de alimentos para «no incrementar la dependencia de terceros».

El PP quiere que también se exija que antes de que se apruebe una norma haya «un informe previo de impacto en la economía rural» porque sino pueden «lastrar» de modo definitivo y la flexibilización del plan estratégico de la PAC, poner en valor el agua y que llegue a todos los territorios de España, una revisión de la cadena alimentaria para que los costes no se multipliquen

También piden entre otras cosas, que se suspenda el impuesto al plástico, se rebaja el IVA de los impuestos esenciales como la carne, el pescado, las conservas y lacteos y se paguen las indemnizaciones por los daños causados,

Ibañez ha señalado que la situación en el campo se ha vuelto «cada vez más complicada» debido a diversos factores, como el aumento de los costos de producción, la creciente burocracia y las políticas de la PAC de ahí que miles de agricultores y ganaderos se han manifestado para exigir al Gobierno de España y a la Unión Europea que adopten medidas que aborden estos problemas, que «están asfixiando al sector».

En Burgos, alrededor de 6000 personas están empleadas en el campo, lo que afecta a unas 6000 familias, un sector representa una parte significativa de la renta agraria en la región, siendo vital para la economía local.