El 50% de las empresas burgalesas no volverían a instalarse en Burgos y si en el extranjero

La Confederación de Asociaciones Empresariales (FAE) ha presentado los resultados del último Índice de Confianza Empresarial de la provincia, correspondiente al segundo semestre de 2023.

Emiliana Molero, Secretaria General en Confederación de Asociaciones Empresariales de Burgos ha estado acompañada por Ignacio San Millán, tesorero de FAE e Iñigo Llarena, el vicesecretario de FAE, quienes han indicado que el 50% de las empresas burgalesas no volverían a abrir una empresa en Burgos y apostarían por salir al extranjero.

Como ha quedado reflejado en el estudio, Molero ha señalado que las empresas burgalesas, en líneas generales, han tenido un buen año 2023. A pesar de ello, muchas de ellas viven un momento de “incertidumbre” y, como en otras ocasiones, no son excesivamente optimistas ante las perspectivas que se abren para este año 2024, pues solo el 20% de los empresarios lo son.

San Millán ha resaltado que para el 45% de las empresas la situación ha mejorado pero preocupa que para el 23% no haya sido así, ya que en 2023, el porcentaje era la mitad.

Aunque el empleo en la provincia es estable, se observa cierto estancamiento en materia de creación de empleo, con solo un 25% de empresas que han apostado por ampliar plantilla y lo que más puede afectar a las empresas burgalesas es el enfriamiento de la economía y el descenso en el consumo.

Para un 60% de los empresarios, el número de pedidos es normal y solo para un 20% es muy bueno, mismo porcentaje que muy malo.

El estudio refleja que preocupa para este año las previsibles nuevas reformas laborales, la reducción del tiempo de trabajo, los nuevos incrementos fiscales, el disparado nivel de absentismo y las escasas políticas incentivadoras para el mantenimiento o incremento de nuestro tejido empresarial.