La Fundación Caja Rural aporta 3.500 euros al Centro de la Memoria Sefardi
Esta aportación se destinará a la compra de mobiliario para la biblioteca del centro
La Fundación Caja Rural ha firmado un convenio de colaboración con el Ayuntamiento de Castrillo Mota de Judíos por el que colaborará con 3.500 euros para la compra de mobiliario destinado a la biblioteca del Centro de la Memoria Sefardí de la localidad.
Tomás Fisac y Lorenzo Rodríguez eran los encargados de firmar este convenio, que posibilitará que esta biblioteca pueda acoger material relacionado con el mundo sefadí. El Centro de la Memoria de Castrillo Mota de Judíos acogerá material de trabajo y estudio de la historia del mundo judío de Castrillo, de la provincia de Burgos, Castilla y León, de España pero también del resto del mundo «para ponerlo en valor y no olvidarnos de dónde venimos y poder mirar al futuro», como señalaba Tomás Fisac, que recordaba que estas iniciativas «van encaminadas a dar a conocer la historia de nuestro entorno ayudando al desarrollo y sobre todo y principalmente en las pequeñas localidades» . Fisac reconoce que «es un privilegio poder participar en este centro de memoria sefardí que empieza a dar sus primeros pasos y creemos que va a ser un punto de encuentro cultural tanto para la comunidad judía de nuestro país como para aquellos interesados en conocer más sobre la cultura judía y sefardí».
Lorenzo Rodríguez agradecía este convenio que ayudará a que este centro pueda ser un referente en la cultura sefardí. Rodríguez recordaba que el próximo día 13 de marzo al parlamento austriaco en nombre de la Asociación Cultural Mota de Judíos, promotora del Centro de la Memoria Sefardí y la recuperación del patrimonio judío en Castrillo Mota de Judíos como una de las cuatro finalistas del Premio Simón Wiesenthal, junto con la austrica Likrat – Lass Uns Reden; el Comité Sueco contra el Antisemitismo, de Suecia; y Zikaron Basaló, de Israel.
Ángel Palomino, director del proyecto del Centro de la Memoria Sefardí de Castrillo Mota de Judíos, recordaba la singularidad de la judería de Castrillo Mota de Judíos,
que por encontrarse fuera del casco urbano, no ha sufrido alteraciones con construcciones posteriores.
En 2014 se comenzó con este proyecto y por extensión con la recuperación de la memoria y de la historia de Castrillo y su origen judío, así como con el trabajo de excavación de una judería excepcional, muy original y con una capacidad y un potencial de desarrollo futuro muy importante.
En cuanto a la Fundación Mota de Judíos se trabaja para que se sumen a esta iniciativa entidades y organizaciones, y poderla poner en marcha.