Sergio Barrio: «Fiestas como la de San Antón hacen pueblo»
Villafranca Montes de Oca recuperaba la festividad de San Antón y la Asociación AUCA trabaja para mantener y poner en valor esta tradición.
Villafranca Montes de Oca celebra a San Antón, patrono del Real Hospital de Peregrinos del Camino de Santiago. En este hospital se atendía a todos los peregrinos, caminantes o pobres. Hasta 1942 se mantuvo la atención a los pobres y enfermos junto con la tradición del día de San Antón, una buena fiesta en el que se oía la misa y después en las cocinas del hospital se preparaban habas cocidas con carne de cebón, plato que se comía por todas las estancias del hospital y se visitaba a los enfermos. Hasta esa fecha, el hospital estaba regentado por la Junta de Beneficencia Local que dependía de la Junta de Beneficencia Provincial y que a su vez de la Central de Beneficencia en Madrid.
Después, en la Sala Concejo, se celebraba un «buen baile» y la festividad duraba dos días, San Antón y San Antonillo.
En 1942, cesó la actividad de este hospital como Beneficencia Pública aunque la tradición de San Antón se mantuvo hasta principios de los años 70. A partir de esta fecha, sólo quedó la misa con la bendición de los panes.
A partir de 1984, unos vecinos jubilados recuerdan que en Villafranca se celebraba San Antón como un día importante y recuperan la tradición, vuelven a preparar las habas, comer todos juntos y la tradición del baile, fiesta que celebran durante cuatro años, hasta 1987, y en enero de 1988 cuando se funda la Asociación Cultural AUCA, es esta la que retoma y organiza la fiesta de San Antón hasta hoy.
La jornada comienza con la misa y la bendición de los panes, continúa con la comida que consta de garbanzos con chorizo, morcilla, el filete o chumarro, y el postre que lleva cada familia. Se tiene una sobremesa y una charanga ameniza el rato. Mañana patatas con chorizo «gracias a mis mujeres y a algún hombre», como señalaba Sergio Barrio, miembro de la Junta Directiva de la Asociación AUCA, a las que agradece su trabajo. El presupuesto de esta fiesta se costea con la Asociación , el Ayuntamiento y una rifa con la que se recaudan fondos para la comida.
En enero de 2020, fueron unas 250-260 personas las que participaron en esta comida porque fue sábado, cifra que desciende a las 200 personas «si cae entre semana», pero se ha llegado a junta hasta los 450, «ese año tuvimos que habilitar todas las salas del edificio de las escuelas» recordaba Sergio Barrio. Estos datos son del día de San Antón, que se repiten el día de San Antonillo.
Barrio, que recuerda las ganas y las fuerzas de la Asociación AUCA para seguir trabajando, ha querido agradecer a «mi grupo de chicas mayores» e invitaba a todo el mundo a que «siga con esta tradición, que participen, colaboren y que hagan lo que buenamente puedan para que no se pierda, porque esta tradición costó mucho recuperarla y esto hace pueblo».
Por supuesto que hay que seguir con esta bonita tradición. Es una fiesta muy especial y muy tradicional.