El Santuario de la Virgen de la Cueva en Hotangas es proclamado monumento
La Junta de Castilla y León ha declarado hoy que el Santuario de la Virgen de la Cueva en Hotangas (Burgos) es un bien de interés cultural, con categoría de Monumento.
Con esta declaración, se delimita un entorno de protección, atendiendo a la ubicación del santuario, formado por el conjunto de parcelas frente al santuario, para preservar la relación existente entre el monumento y el medio físico.
Historia del monumento
El santuario de la Virgen de la Cueva es una construcción rupestre, que aprovecha gran parte de una amplia gruta caliza de cuyo interior brota el agua.
La cueva queda dividida en dos recintos de distinto nivel y similares dimensiones, separados por una verja de hierro forjado sobre un basamento de mampostería. A ambos lados de la entrada, un banco corrido tallado en la roca y nueve gruesos pilares de piedra de estilo neoclásico sujetan el techo.
Es una talla románica de transición al gótico, de madera policromada. El interior de la ermita conserva una interesante colección de exvotos, de agradecimiento. Al exterior, la fachada de piedra de estilo básicamente renacentista, con algunos remates barrocos, y remata en una espadaña de dos cuerpos, sobre las que se dispone un frontón partido al estilo barroco.
También cuenta con la presencia de un importante enclave bajo imperial, bajo el propio casco urbano de Hontangas sugeriría la posible continuidad de la cueva como lugar sagrado más allá de Época Altoimperial y el inicio de un proceso de cristianización del santuario.
A comienzos del siglo XX, esta institución es sustituida por la Cofradía de la Virgen de Hontangas, con un carácter más local, que organiza procesiones vinculadas al fin de semana de resurrección y a la festividad mariana del 11 de septiembre.