El alcalde en tu barrio
Daniel de la Rosa mantiene una reunión con vecinos del barrio del Crucero y San José para conocer sus problemas y preocupaciones de primera mano dentro del programa «El alcalde en tu barrio».
Se ha comprometido a volver dentro de un año para ver cuáles de las propuestas se han cumplido.
El Centro municipal del barrio del Crucero acogía una reunión en la que el alcalde, Daniel de la Rosa, ha querido conocer de primera mano, los problemas, preocupaciones y sugerencias de los vecinos.
Han sido muchas las cuestiones que se han tratado, aunque alguno de estos problemas se arrastran desde hace mucho tiempo, como el problema de los ocupas, presentes en varios edificios del barrio y de las cercanías, como los que se encuentran en el inmueble situado en la calle Santa Clara, donde alguno de los presentes relataba las amenazas con navajas e insultos que sufren. Nuria Barrio recordaba que este problema ya está denunciado y tiene que ser la Justicia la que lo solucione. En cuanto al edificio de Lejías El Cid, los técnicos municipales no creen que se encuentre en estado de ruina, por lo que son los propietarios los que tienen que tomar medidas, no el Ayuntamiento de forma subsidiaria, como apuntaban algunos de los presentes.
Los vecinos han pedido también mejoras en calles y aceras del barrio, en iluminación, regulación de aparcamientos o en la velocidad de los vehículos que circulan por la zona. También sugerían mejoras en los carriles bici, en concreto, en el Bulevar a la altura del puente de la autovía, «que no existe, desaparece».
La pasarela que cruza la autovía A-11, cuya cosntrucción fue muy polémica en su día, está siendo invadida por grafitis. Algunos de los vecinos sugerían que se contratara o invitara a artistas de estos grafitis a «pintar» los muros de esta pasarela con imágenes de la provincia o de Burgos, para de esta forma, evitar estos actos vandálicos. De la Rosa les ha explicado, que la pasarela es competencia del Ministerio de Fomento, por lo que desde el Ayuntamiento se podría sugerir, pero nunca ejecutar.
Para concluir, Daniel de la Rosa se ha comprometido a volver en un año para ver qué propuestas con las que hoy se ha comprometido se han cumplido.