Tres detenidos en Burgos por un presunto delito de tráfico de estupefacientes

La Policía Nacional de Burgos ha llevado a cabo un operativo contra el tráfico de estupefacientes entre pequeños traficantes y consumidores. Se intervinieron 3.000€ en efectivo, 350 gramos de cocaína  y útiles para su preparación, distribución y venta   

La Policía Nacional de Burgos ha detenido a tres varones por un presunto delito de estupefacientes tras llevar a cabo un operativo contra el tráfico de estas sustancias entre pequeños vendedores y consumidores. Así, el pasado 12 de noviembre policías de la Comisaría de Burgos arrestaron a dos hermanos de 30 y 34 años respectivamente y a un tercer individuo de 35 años.

Como en otras ocasiones, se puso en marcha una investigación dirigida a la detección y persecución del tráfico de estupefacientes por parte de personas  que se dedican a esa actividad ilícita y que con su proceder promueven y  favorecen el consumo de droga. Concretamente los agentes tuvieron conocimiento de la existencia de un individuo que podría estar desarrollando esta actividad y carecía de un trabajo que le reportara ingresos. Se inició una discreta vigilancia sobre esta persona, en la que los agentes pudieron constatar que a diario se desplazaba hasta Burgos con su vehículo. Llevaba a cabo múltiples paradas en la vía pública donde contactaba unos instantes con personas que permanecían en clara actitud de espera y con las que realizaba algún intercambio. En otras ocasiones, esos encuentros que previamente se habrían establecido, se producían en la terraza de algún establecimiento o en sus inmediaciones.

Durante la vigilancia también se pudo comprobar que en la mayoría de las  ocasiones al investigado lo acompañaba otro varón que alternativamente conducía, o también se reunía con los «clientes», resultando obvio que los dos compartían y participaban de la misma actividad. La detención de ambos, que resultaron ser hermanos y, al parecer compartían domicilio, se produjo en la vía pública y durante la misma también se detuvo a una tercera persona con la que habían intercambiado droga, concretamente cocaína, interviniéndoles 3.000 euros en efectivo.

La cantidad de droga intervenida en el momento de la detención y en el posterior registro domiciliario ascendió a 350 gramos de una sustancia rocosa, que resultó ser cocaína. Asimismo se encontraron cápsulas de cafeína que se utilizan como sustancia de corte y tres básculas de precisión. También se encontraron útiles para la preparación y posterior distribución de la droga a través de venta en monodosis a los consumidores. 

La investigación pudo determinar que cada uno de los detenidos tendría una función determinada en la actividad delictiva, siendo el principal  investigado el que se dedicaría al tráfico de droga contando con la infraestructura necesaria en su domicilio. Su hermano, quién le ayudaría a realizar y agilizar las transacciones con el vehículo y el tercero de los detenidos, distribuidor, al que los primeros abastecerían para así satisfacer la demanda de los consumidores. 

Han sido puestos a disposición de la Autoridad Judicial, quien decretó el ingreso en prisión de dos de los detenidos.