El Ayuntamiento presenta el Plan de Acción para el Clima y la Energía Sostenible de Burgos
Un total de 65 medidas integran este plan dentro de medidas de mitigación del cambio climático y medidas de adaptación. El Plan, que tiene como objetivo la reducción del 40% de emisiones de CO2 en 2030, tiene un presupuesto de casi 38 millones de euros
Fotografías: Beatriz Plaza.
La ribera del río Arlanzón ha sido testigo esta mañana de la presentación del Plan de Acción para el Clima y la Energía Sostenible de Burgos (PACES), presentado por el alcalde de Burgos, Daniel de la Rosa y el concejal de Medio Ambiente, Josué Temiño. El Ayuntamiento de Burgos se adhirió al Pacto de los Alcaldes para el Clima y la Energía con su firma en el pasado Pleno del 17 de noviembre de 2017. La proposición socialista fue aprobada por unanimidad por todos los grupos políticos.
El Pacto de los Alcaldes es el mayor movimiento mundial de ciudades por la acción local en clima y energía. El compromiso de este Pacto es la reducción de las emisiones de la ciudad de CO2 en un 40% en el año 2030, aumentar la eficiencia energética un 27% y aumentar el uso de fuentes de energía renovables otro 27%. Por otra parte, se ha comprometido a aumentar la resiliencia para adaptarse al impacto del cambio climático mediante la implantación de medidas de adaptación. Este compromiso político ha de traducirse, como así se ha hecho, en medidas y proyectos recogidos en el Plan de Acción para el Clima y la Energía Sostenible (PACES) que hoy se ha presentado y que es el documento donde se establecen las acciones clave que se pretende acometer.
«Desde entonces hasta el inicio del mandato actual no se hizo nada. Nos suscribimos, el alcalde Lacalle derivó el acuerdo pero ahí se quedó ‘en papel mojado'», explicaba De la Rosa. Esta situación se prolongó así hasta que el concejal de Medio Ambiente, Josué Temiño, asumió este compromiso. No solamente se ha tratado de elaborar un Plan, sino que previamente se elaboró un inventario de emisiones de referencia para tener datos contrastables de la situación de la ciudad en 2019 y 2020 así como la realización de una evaluación de riesgos y vulnerabilidad derivados del cambio climático del municipio. Se tiene así un compromiso de cada dos años de evaluación y en 2023, una vez que finalice el mandato municipal, se elaborará un informe de situación y tendrá lugar una comisión evaluadora.
El concejal de Medio Ambiente, Josué Temiño, ha explicado que a finales de 2019, iniciado el nuevo mandato, se contrató a la asistencia técnica para la elaboración del Plan y poder obtener informes de situación para llegar al compromiso de 2030. Durante 2020 se ejecutó esta asistencia, en la que hubo tres talleres de participación ciudadana. El primero de ellos fue presencial, antes de la entrada del COVID-19 y los otros dos al final de año. A finales de 2020 estaba ya cerrado este Plan. El Plan de Acción para el Clima y la Energía Sostenible de Burgos se basa en dos líneas fundamentales: las medidas de mitigación del cambio climático, aquellas encaminadas a la reducción del CO2 en la ciudad y una serie de medidas de adaptación, aquellas encaminadas a reducir la vulnerabilidad de los riesgos en distintos sectores.
El PACES tiene un presupuesto a diez años de 37.710.816,35€, de los cuales alrededor de 18 millones están incorporados ya en el Plan de Movilidad Urbana Sostenible que ha sido aprobado recientemente. Además está presupuestado a aquellas subvenciones y ayudas de Fondos Europeos. Temiño además ha explicado que dentro los ámbitos que dependen del Ayuntamiento en cuanto a edificios municipales, el alumbrado público y transporte municipal, las emisiones generadas que han salido de estos estudios de la ciudad son de 23.138,47 toneladas de CO2. Con la realización de este tipo de medidas el Ayuntamiento pretende un ahorro de emisiones de 604.817 toneladas de CO2 en 2030.