La Guardia Civil investiga a una persona por simulación de delito e intento de estafa

Denunció falsamente la sustracción del interior de su vehículo de objetos por valor de 750€. La investigación ha demostrado que todo fue una invención con la intención de obtener un beneficio económico del seguro

La Guardia Civil ha investigado a R.A.M. (45) como presunto autor de un delito de simulación de delito por denuncia falsa y de estafa en grado de tentativa, al pretender obtener un beneficio económico del seguro. Según el denunciante, los hechos ocurrieron el pasado mes de enero, en un municipio del Alfoz de Burgos. El vehículo, que permanecía estacionado en una calle, sufrió un robo en horario nocturno. El autor o autores habían forzado una ventanilla y accedido al interior, de donde sustrajeron un ordenador portátil, unos auriculares y un juego de llaves de varias propiedades.

La Guardia Civil sospechó desde el primer momento de la veracidad de los hechos narrados, se hizo cargo de la investigación y practicó numerosas pesquisas para comprobar la autenticidad del modus operandi relatado por la víctima. Ahora ha demostrado que todo fue una invención con la intención de estafar al seguro; nadie accedió al interior del vehículo como manifestó y por lo tanto no se produjo la sustracción de los objetos que echó en falta, como dijo.

Las pesquisas llevadas a cabo han aclarado que todo fue una farsa, que decidió presentar denuncia, pese a conocer que lo hacía falsamente, como paso obligatorio para cobrar la indemnización de la aseguradora y así obtener un importante beneficio económico. R.A.M. ha sido investigado como presunto autor de los delitos de simulación de delito y de estafa en grado de tentativa. Las diligencias instruidas han sido entregadas en el Juzgado de Instrucción Nº 1 de Burgos.

Denunciar falsamente puede tener sus consecuencias

Ningún ilícito cometido a través de la web o en el que se pretende obtener una indemnización del seguro, encubrir negligencias o descuidos, del orden de las estafas, timos o ventas fraudulentas, queda impune, a pesar de lo que equivocadamente piensa el autor/es enmascarado bajo el supuesto y falso anonimato que proporciona Internet; existe la denominada «huella digital».

Denunciar falsamente hechos que no han ocurrido conlleva consecuencias penales para la que se contemplan sanciones de hasta 6.000 euros y pena de prisión de hasta tres años, además de generar antecedentes procesales que pueden limitar durante años el acceso a un puesto de trabajo en la administración pública.

Alertar con avisos inventados o falsos, detrayendo por tanto a las Patrullas de sus cometidos asignados, pueden tener además graves consecuencias como por ejemplo por alteración del orden público u obstruir la rápida y eficaz resolución de un incidente real acaecido.