La Junta Directiva de FAE exige que se consulte a las organizaciones empresariales antes de tomar medidas restrictivas para las empresas
El órgano de representación de la patronal de Burgos se reunió el pasado jueves por la tarde para analizar los daños que las nuevas restricciones aplicadas por el Gobierno autonómico generarán en el tejido productivo de Burgos
Los representantes de todos los sectores económicos de la provincia de Burgos, así como sus organizaciones de Aranda de Duero y Miranda de Ebro, se reunieron el pasado jueves por la tarde en el marco de una sesión extraordinaria de la Junta Directiva de la Confederación de Asociaciones Empresariales de Burgos (FAE) para analizar las consecuencias que las nuevas medidas anti pandemia dictadas por la Junta de Castilla y León van a provocar en el tejido productivo de Burgos, por las que expresaron su profundo malestar y redactaron un comunicado.
En este sentido, la Junta Directiva de FAE ha puesto de manifiesto en dicho comunicado que en el último año, y como consecuencia de la crisis económica derivada del COVID-19, han desaparecido en Burgos 1.044 empresas y se han destruido cerca de 3.500 empleos; que el Producto Interior Bruto (PIB) ha descendido un 8%; y que la tasa de desempleo se ha incrementado en un año en un 23,7%, lo que supone que 22.782 personas se encuentran en estos momentos sin trabajo en la provincia de Burgos. A ello debe sumarse la cifra de 5.800 trabajadores que se encuentran en situación de ERTE.
Según la Junta Directiva de FAE, las recientes medidas restrictivas no vienen si no a agravar la fragilidad de la economía burgalesa, la cual, pese al tirón de las exportaciones durante los últimos meses del pasado año y la buena campaña agrícola, se ha visto afectada directamente en todos sus sectores, aunque hayan sido específicamente las empresas de la actividad de servicios las más gravemente afectadas. Por ello, la patronal burgalesa, y a fin de minimizar los daños que el COVID-19 seguirá generando en la economía, exige a la Junta de Castilla y León, y al resto de las Administraciones en el ejercicio de sus respectivas competencias, coordinación y celeridad en la vacunación a la población, así como en la realización de pruebas y test diagnósticos, con el fin de mantener la curva de contagios lo más limitada posible y lograr que la economía regrese a unos ratios aceptables, en el marco de la situación de pandemia que estamos sufriendo. Del mismo modo, la patronal solicita que cualquier medida restrictiva a la actividad económica se implante de forma estudiada y consensuada con las organizaciones empresariales más afectadas.
Asimismo, la Junta Directiva de FAE ha insistido en la necesidad de ayudas económicas directas, en las que se contemple el lucro cesante, por parte de las distintas Administraciones Públicas a los sectores más perjudicados, con el fin de evitar una catástrofe de consecuencias económicas imprevisibles en el tejido empresarial. Y que éstas se planten en el marco de una mesa de negociación específica.
El comunicado de FAE solicita también que se retire cuanto antes el cierre perimetral de la Comunidad autónoma y de todas las provincias de Castilla y León.