El alcalde de Burgos exige a la Junta que asuma sus compromisos con los sectores económicos más afectados
De la Rosa se muestra optimista pero prudente respecto a la incidencia de la pandemia en la ciudad de Burgos, después de comprobar que esta ha caído un 29% en la última semana, aunque la ciudad sigue doblando la media del resto de capitales de provincia de la Comunidad
El alcalde de Burgos, Daniel de la Rosa, participó ayer por la tarde en una reunión telemática junto otros alcaldes y alcaldesas de municipios de más de 20.000 habitantes, así como presidentes de Diputaciones de Castilla y León con responsables de la administración autonómica. Por parte de la Junta de Castilla y León han tomado parte el Presidente, Alfonso Fernández Mañueco, el Vicepresidente Francisco Igea, el Consejero de Presidencia, Ángel Ibáñez y el Consejero de Fomento y Medio Ambiente Juan Carlos Suárez-Quiñones.
En la reunión se valoraron distintas medidas de estímulo y apoyo económico que están planteando las diferentes administraciones, con el objetivo de combatir las consecuencias de la segunda ola de la pandemia del COVID-19. A este respecto, el regidor burgalés exigió a la Junta de Castilla y León que «asuma sus competencias» ya que «hasta ahora las administraciones que proporcionalmente a sus presupuestos más han comprometido en ayudas, son los Ayuntamientos».
Ante el anuncio del ejecutivo autonómico de un nuevo plan de ayudas para el que ha solicitado la colaboración de las entidades locales, De la Rosa declaró que estas «no pueden cofinanciar esos planes porque los gastos extraordinarios nos están ahogando». A ese respecto, añadió también que lo que sí pueden aportar decididamente es la colaboración y coordinación para que todos los recursos públicos tengan el mejor destino evitando duplicidades.
En el encuentro telemático, De la Rosa mostró cierto alivio porque Burgos «comienza a ver la luz al final del túnel» una vez que los datos de la actual ola de contagios han mejorado un 29% en la última semana. Aunque esas cifras siguen siendo extremadamente preocupantes (la incidencia acumulada de casos diagnosticados en 14 días está en 1275 y la de 7 días en 525), existe una tendencia positiva en estos últimos días, hecho que el alcalde atribuye a la respuesta responsable de la ciudadanía burgalesa y a las «medidas complementarias tomadas por el Ayuntamiento de Burgos y la Junta de Castilla y León» y a la cooperación institucional entre esas administraciones y el Gobierno de España.
Ante el planteamiento realizado por la Junta de Castilla y León de establecer, a partir del día 3 de diciembre, una posible relajación de algunas de las medidas tomadas si se mantiene esta evolución positiva, el regidor burgalés advirtió que es necesario un equilibrio muy cuidadoso entre esa relajación y la seguridad necesaria para limitar la propagación de los contagios, «es imprescindible actuar con la máxima prudencia para evitar cometer el error de precipitarnos y encontrarnos en una situación similar o peor que la actual al finalizar las navidades».
En concreto, y respecto a la reapertura de los establecimientos que ahora mismo no pueden ejercer su actividad, el alcalde burgalés planteó la posibilidad de premiar aquellos negocios que aseguran en mayor grado las medidas de seguridad, otorgándoles algún tipo de distintivo respecto a aquellos que no ofrecen las mismas garantías sanitarias.