Castilla y León y Cantabria sellan una alianza para mejorar la prestación de servicios comunes en 19 áreas de actuación
Los presidentes autonómicos Alfonso Fernández Mañueco y Miguel Ángel Revilla han firmado en la localidad burgalesa de Arija un amplio convenio de colaboración que refuerza la atención de las necesidades de la ciudadanía en áreas limítrofes de ambas comunidades.
Los presidentes de las comunidades autónomas de Castilla y León y Cantabria, Alfonso Fernández Mañueco y Miguel Ángel Revilla, han formalizado, en la localidad burgalesa de Arija, la firma de un convenio de colaboración para mejorar la prestación de los servicios públicos en común que se extenderá a cerca de una veintena de áreas de actuación.
Ambos presidentes han puesto de manifiesto que las fronteras administrativas no deben ser un obstáculo para atender las necesidades de las personas, por lo que se contemplan actuaciones conjuntas en numerosas áreas de interés común, como son la atención sanitaria, educación y servicios sociales, medio ambiente, infraestructuras, cultura y turismo, economía e innovación, protección civil o atención al ciudadano.
En especial, esta iniciativa contribuye a la cohesión social y permite mejorar las condiciones de vida de la ciudadanía residente en las áreas limítrofes de ambas comunidades autónomas, algo importante al ser zonas con dispersión de la población y envejecimiento de sus vecinos, que verán mejorados los servicios que reciben y podrán ahora ser atendidos en los centros sanitarios más próximos, aunque no pertenezcan a su comunidad autónoma.
Contenido del convenio
– Este acuerdo contiene importantes puntos de encuentro en multitud de materias con especial atención a la sanitaria, donde se incluye la Atención Primaria, Atención Hospitalaria, Atención Sanitaria en Urgencias, Emergencias y Transporte Sanitario y la colaboración en el Programa de Trasplante Pulmonar.
A partir de ahora, se utilizarán los recursos más cercanos, independientemente de que éstos pertenezcan a una u otra comunidad autónoma.
En concreto, en atención primaria, vecinos de los pueblos de Valderredible podrán ser atendidos en la zona básica de salud de Valle de Valdebezana (Burgos) y, de forma recíproca, desde la localidad cántabra de Mataporquera y de Valderredible se atenderá a la población palentina.
En atención hospitalaria, pacientes de varios pueblos de Valderredible podrán ser asistidos en el complejo residencial de Burgos y el Hospital Tres Mares de Reinosa hará lo propio con más de 12.000 habitantes de Castilla y León, en concreto procedentes de Palencia. Desde el centro cántabro también se realizará la prestación radiológica programada a pacientes de Palencia y se mantiene la colaboración en el programa de trasplante pulmonar del Hospital Valdecilla.
En salud pública, Cantabria y Castilla y León diseñaran programas de actuación conjuntos y estrategias de intervención en materia de prevención de peligros biológicos, químicos y físicos.
– En materia educativa, se abrirá la posibilidad de que los alumnos de localidades limítrofes de ambas comunidades puedan disfrutar de los derechos relativos a admisión en centros y servicios complementarios de comedor, transporte, ayudas al estudio y, en su caso, residencia.
Del mismo modo, se abren varias vías de colaboración de intercambio de experiencias y buenas prácticas educativas como es el caso de los sistemas de evaluación; planes de apoyo a la formación profesional y a la relación universidad-empresa; fomento de la lectura e implantación de enseñanzas bilingües, así como programas de intercambio y cooperación en materia de formación del profesorado y dotación de recursos humanos en zonas limítrofes, entre otros.
– En relación a la cooperación en materia medioambiental, el protocolo aborda el trabajo coordinado en la gestión de los recursos naturales comunes en zonas limítrofes para lo que se establece un proceso de intercambio de información y soluciones de gestión orientados a la extinción de incendios forestales, los espacios naturales protegidos cercanos a zonas limítrofes y la gestión forestal.
En el Embalse del Ebro, se establece una colaboración especial para impulsarlo como recurso turístico y natural, y se refuerza la cooperación en materia de movimiento de ganado y gestión del lobo.
– Las infraestructuras de comunicación y transportes supondrán la creación de un grupo de trabajo para la vigilancia y seguimiento de la ejecución de vías y conexiones con las grandes redes ferroviarias de competencia y responsabilidad estatal. Además, se apuesta por la colaboración en materia de carreteras de titularidad autonómica y que afecten a ambos territorios, transporte de viajeros, la potenciación del tráfico de mercancías, y el impulso de ambas comunidades en el proyecto Corredor Ferroviario Atlántico de la Red Transeuropea de Transporte, de gran interés para potenciar la conexión del puerto de Santander con la provincia de Palencia.
– En materia cultural, el protocolo recoge el compromiso en el refuerzo de los vínculos existentes entre ambos territorios como un elemento clave para el desarrollo económico y social, lo cual posibilitará la colaboración en el impulso al patrimonio de recursos tan importantes como el románico, y el establecimiento de cauces de colaboración en la promoción cultural en relación a actos, eventos, exposiciones, entre otros.
– En el ámbito turístico, se pretende fomentar recursos de gran relevancia como los Caminos Lebaniegos y Camino de Santiago, recursos naturales y culturales relativos al origen y evolución humana tales como la Cueva de Altamira o el Yacimiento de Atapuerca, y la colaboración y promoción en el flujo de viajeros, jornadas comerciales y mercados de contratación. Se recoge la constitución de una comisión específica para el análisis de una conexión por vía verde entre ambas comunidades, a través de la recuperación del túnel de La Engaña o de un trazado alternativo.
– En materia económica y competitividad, ambas comunidades asumen el compromiso de cooperar en sectores como la automoción y las energías renovables, la internacionalización empresarial, el fortalecimiento de la estructura industrial en el sector electrointensivo, o el impulso en materia de hacienda con la colaboración en gestión tributaria y de análisis y seguimiento del sistema de financiación autonómica; éste último punto de especial relevancia para que se tenga en cuenta el coste efectivo de los servicios que se prestan, así como singularidades compartidas por ambas comunidades, como la dispersión, el envejecimiento y la orografía.
Servicios sociales y atención a las personas
– En lo referente a los servicios sociales y atención a las personas, esta colaboración será de especial interés en materias como la atención a la Dependencia, donde se valorará la puesta en marcha de un procedimiento coordinado ante situaciones de cambio de residencia de personas beneficiarias del Sistema de Dependencia; la protección a la infancia y los menores de edad, impulsando la colaboración en procesos de adopción o atención a menores infractores, entre otras medidas.
– También, se establecen iniciativas para el acceso a las programaciones dirigidas a personas mayores de ambas comunidades y la utilización común de los puntos de encuentro familiar más cercanos al domicilio del menor.
– En materia de protección civil y emergencias, el protocolo refuerza la atención de las emergencias en áreas limítrofes y la cooperación entre servicios autonómicos mediante la colaboración activa en formación de personal, elaboración de protocolos de emergencia, movilización de medios o la celebración de cursos y jornadas.
– La simplificación administrativa y atención al ciudadano también tienen un capítulo relevante en la colaboración, buscando con ello facilitar al ciudadano información, orientación y asesoramiento sobre los principales servicios públicos de ambas Administraciones. En concreto, se fijan mecanismos de interconexión de registros, colaboración entre servicios 012 y reducción de cargas administrativas a empresas y emprendedores.
– La innovación se verá impulsada a través de la búsqueda de sinergias entre ambas comunidades, la colaboración entre organismos públicos de investigación, centros tecnológicos y cluster.
– En materia de consumo, se potenciará la protección de los consumidores y usuarios en aspectos como la tramitación de denuncias y reclamaciones, o la vigilancia del mercado de productos industriales y servicios, entre otros.
– Respecto a igualdad, se promoverán experiencias comunes para la formación especializada en la atención a víctimas de violencia de género y atención al colectivo LGTBI, así como otras tendentes a reforzar el tejido asociativo de ambas comunidades para favorecer la actividad conjunta.
– En relación a la cooperación al desarrollo, se establecerán alianzas y el impulso de grupos de trabajo que tengan por objeto contribuir a reforzar una cooperación fuerte y de calidad, cohesionada con la estrategia de desarrollo sostenible y la Agenda 2030.
– También el Juego Responsable tiene cabida en este protocolo, materia en la que ambos gobiernos se comprometen a colaborar a la hora de compartir estrategias para apoyar la prevención de ludopatías y proteger a colectivos vulnerables, así como compartir técnicas legislativas o regulatorias más garantistas, por ejemplo, desde el principio de seguridad jurídica.
– En materia de acción exterior y desafío demográfico, un asunto que afecta a ambas regiones, se apuesta por la coordinación de esfuerzos para defender esta problemática ante instituciones y órganos de la Unión Europea, buscando que el desafío demográfico sea una prioridad política.
– Por último, en el ámbito de universidades, Cantabria y Castilla y León colaborarán en la puesta común de acciones de internacionalización y el intercambio de información sobre los modelos de financiación de las universidades públicas.
Todas las materias establecidas en este protocolo podrán concretarse en acciones específicas, a través de la firma de los oportunos convenios de colaboración, y se constituirá un Comité de Enlace y Coordinación encargado de su seguimiento y aplicación, presidido por los consejeros de Presidencia de ambas comunidades autónomas.
El convenio general, firmado hoy por los presidentes de Cantabria y Castilla y León, tendrá una vigencia de un año y será prorrogable.