A 105 kilómetros por hora con 9 años

Daniel Sabugo Velasco no recuerda cuando comenzó su pasión por el volante, aunque con 9 años ya lidera el Campeonato de Castilla y León de Karts en su categoría.

«Cuando era pequeño, mi padre me llevaba al karting, quise probar y me gustó». Así nació la afición por el motor de Daniel Sabugo Velasco, Dani,  cuando apenas se le veía al volante de su coche. Y no es que ahora se le vea demasiado, porque él dice que sí que ve pero a él apenas se le divisa dentro del coche. Para este chaval de Arcos de la Llana, sólo han pasado dos años desde comenzó a competir, y en su categoría, de momento mantiene el liderato en Castilla y León con la última victoria en el circuito de Kotarr, en Tubilla del  Lago.

Su primera prueba fue con 7 años en un Social de Rookies(categoría de 7 y 8 años), en Cabañas Raras, pero la afición venía de antes,  porque este chaval de 9 años desde que recuerda le gustaban los coches. Va a 105 kilómetros por hora y no tiene miedo, le gusta y disfruta de cada momento, de cada curva, de cada carrera, «intento recortar en las curvas para adelantar al que tengo por delante», aunque no se alegra porque «tengo otro por delante a 5 minutos».

Ha corrido en Cabañas, quedó segundo, en Benamariel, donde ya quedó primero y este pasado fin de semana ha sido en Kotarr, donde ha quedado primero afianzándose en la primera posición de campeonato de Castilla y León en la categoría de alevines. El pasado año fue seleccionado para correr en la categoría Academy » y quedé cuarto»

Sus referencia en este deporte son Fernando Alonso, Hamilton y Vettel, y su meta la Fórmula 1, pero Dani tiene madera, ganas y tesón. Uno de los condicionantes que tiene sobre él son las notas de clase, su madre Mirella deja claro que «seguirá compitiendo mientras saque buenas notas» y parece que es un buen aliciente, porque eso de que «si saco malas notas del karting me olvido», parece que lo tiene bien grabado y las notas son muy buenas. En clase, aunque no lo digan parece que alguno sí que tiene un poco de envidia,  al igual que Dani  la tiene de sus referentes campeones del mundo. Y si los F1 tienen accidentes, Dani ya ha sufrido algunos «una vez que volqué, otro me hizo trompear y otro me chocó», y aunque no le ocurrió nada sintió miedo, y más aún sus familiares, sus padres y su hermano pequeño, que aunque no comparte afición para ponerse al volante,  presume de campeón en la familia. Se siente miedo, pero se comparte su ilusión, apunta Mirella y «es lo que le gusta».

Lleva tres carreras disputadas en el Campeonato de Castilla y León y quedan aún dos más, y si todo discurre como hasta ahora, se proclamará campeón de Castilla y León.

Su coche es un Birel Art Kubica que alcanza los 105 kilómetros por hora en la categoría Alevín. En el Campeonato de España pasará a la categoría Mini, aunque en Castilla y León le quedaría un año más en la categoría en la que milita ahora, si no hay cambios.

El llegar a la Fórmula 1 es un sueño y sobre todo, conseguir patrocinadores que permitan mantener en lo más alto a Dani, porque prometer, promete y mucho.