«Volvemos con muchas ganas de tocar de nuevo el balón»
El entrenador del San Pablo Burgos, Joan Peñarroya, y el capitán, Javi Vega, comparecen en el primer día de regreso a la pista
En la tarde de este miércoles, el San Pablo Burgos ha retomado los entrenamientos individualizados en la cancha del Polideportivo El Plantío, manteniendo las normas de los protocolos de seguridad sanitaria establecidos.
El entrenador del equipo burgalés, Joan Peñarroya, ha afirmado que han arrancado el trabajo «intentando volver a una cierta normalidad» y, sobre todo, «con muchas ganas de tocar el balón», aunque siempre «con la distancia que marcan todos los protocolos». La labor deberá realizarse de esta forma, «poco a poco», ya que «estamos ante una situación nueva para todos», especialmente para los jugadores, que nunca «habían estado dos meses en casa encerrados».
Lo primordial en este reinicio será «cuidar su salud y preparar el cuerpo para que, de aquí a diez días, podamos ver si es posible empezar a hacer un entrenamiento más similar a lo que se acostumbra en temporada». De cara a esa futura reanudación de la Liga Endesa para disputar la fase final, «creemos que si no se producen contratiempos a nivel de lesiones, que vamos a intentar evitar al máximo, llegaremos en unas condiciones aceptables», ha destacado.
No obstante, se antoja complicado tras estas semanas de parón, y a pesar de que los miembros de la plantilla han trabajado desde casa, alcanzar el nivel que venía manteniendo el San Pablo Burgos durante la competición.»Difícilmente vamos a llegar con este poco tiempo a unas condiciones que se asemejen, por ejemplo, a como acabamos las últimas semanas antes del confinamiento», ha reconocido el técnico.
Joan Peñarroya ha subrayado que lo importante es que «vayamos dando pasos adelante que sean sólidos y que nuestros jugadores cada día estén mejor; después, intentaremos competir lo mejor posible».
Una situación extraña para el capitán del equipo
«Ha sido una sensación especial, es como una pretemporada», ha asegurado el capitán del San Pablo Burgos, Javi Vega, que ha regresado a la cancha con «la necesidad de moverte, de jugar al baloncesto y de ver a los compañeros». Los entrenamientos por turnos han hecho que el fuenlabreño aún no haya podido reencontrarse con todos ellos: «Todavía no he visto a todos los compañeros, pero a los que he visto, ha sido con sillas a cinco metros o más de distancia».
La situación es «muy extraña», ha apuntado Vega, «partiendo de que los entrenadores van con mascarilla» y asimila este escenario con «la técnica individual que puedes trabajar en verano». En la misma línea de las palabras del entrenador, el ala-pívot ha señalado que «es una buena toma de contacto, volver a empezar poco a poco, y evitar las lesiones».