La exposición «En Busca de la Luz: el Arte de las Vidrieras» ensalza este arte en el Centro de Recepción de Turistas.
El Centro de Interpretación y Recepción de Turistas de Burgos (CITUR) ha inaugurado hoy la nueva exposición «En Busca de la Luz: el Arte de las Vidrieras» en el sótano del propio centro.
El Ayuntamiento de Burgos ha diseñado esta muestra permanente para acercar al turista, y a la sociedad burgalesa, la importancia de Burgos en el arte de la vidriería. Bajo la coordinación de la profesora de la Universidad de Burgos, Pilar Alonso, la exposición «En Busca de la Luz: el Arte de las Vidrieras» incluye algunas de las vidrieras más destacadas del panorama burgalés, como las que se encuentran en la Catedral o el Monasterio de las Huelgas Reales.
La exposición cuenta con dos réplicas, una de la vidriera de la iglesia de la Cartuja de Miraflores dedicada a Pentecostés (la original corresponde a Niclaes Rombouts) y otra dedicada a la Virgen con el Niño, que se encuentra en el Coro de invierno del Monasterio de Las Huelgas, y que fue realizada entre los años 1.200 y 1.220 por un autor anónimo francés, e incluye paneles con la representación de las vidrieras más simbólicas de Burgos, así como un vídeo explicativo de casi 5 minutos. Pilar Alonso ha asegurado que la exposición se irá actualizando y se incluirán también ejemplos de vidrieras destacadas en los ámbitos civil y militar.
Historia del Arte
La profesora de la UBU, Pilar Alonso, ha querido explicar que el arte de la vidriera llegó a Burgos en la Edad Media procedente de Francia e impulsado por monarcas y obispos, lo que convirtió a la ciudad en foco neurálgico de la creación y producción de este arte en el siglo XIII, siendo el Real Monasterio de Las Huelgas uno de los primeros lugares en los que se incorporaron vidrieras en la capital.
Ha destacado que el Monasterio de las Huelgas Reales recoge las primeras vidrieras de la Península Ibérica y que la Catedral presenta algunas de las creaciones más importantes, como el rosetón de la Puerta del Sarmental, que se encuentra en muy buen estado de conservación, o los óculos menores de la Capilla de Santa María.
En el siglo XVI, Burgos pasó a ser un epicentro comercial de vidrio, y su relevancia se mantuvo siglos posteriores, con nuevas creaciones y la época de la restauración de las vidrieras históricas.
Al acto de inauguración han acudido Levi Moreno acompañado por David Jurado, alcalde «por accidente» del Ayto. de Burgos, distintos representantes de los grupos políticos de la ciudad, y Enrique Barrio, maestro vidriero.
