Campaña de sensibilización sobre los prejuicios de acceso a la vivienda para migrantes y refugiados
El Ayuntamiento presenta su nueva campaña «Somos vecinos» Burgos es hogar, para que la sociedad comprenda este problema, su magnitud y que las personas que alquilen un piso en Burgos no caigan en prejuicios sobre los migrantes y refugiados
El Ayuntamiento de Burgos junto con otras entidades sociales ha presentado y puesto en marcha una campaña de sensibilización sobre los problemas de accceso a la vivienda de las personas migrantes y refugiados en la ciudad. Bajo el lema «Somos vecinos» Burgos es hogar, pretende que la sociedad comprenda este problema y su magnitud y que las personas en disposición de una vivienda y con intención de alquilarla no caigan en prejuicios o estereotipos sobre las personas migrantes o refugiadas.
Esta campaña busca fomentar que las personas con disposición de vivienda y con intención de alquilarla pero con reticencias a hacerlo a personas migrantes cambien su opinión. Otro de los objetivos es aumentar la empatía con las personas inmigrantes y refugiadas para favorecer su participación en la sociedad y desarrollar la concienciación social acerca de este problema desconocido para un gran número de habitantes de Burgos.
Para dar forma a la campaña se ha contado con 12 testimonios entre inquilinos y arrendadores de viviendas, formando un vídeo de unos dos minutos que se encuentra disponible en la página web, www.burgoseshogar.es. El audiovisual muestra a protagonistas asentados en Burgos trasmitiendo sus sensaciones después de que personas con viviendas en propiedad se las hayan alquilado.
Uno de los protagonistas del vídeo y que ha hecho acto de presencia en la presentación de la campaña es Yanik. Ha explicado que no ha sido nada fácil lograr encontrar un techo donde vivir en los cinco años que lleva en Burgos. Ha contado que pasó por varias asociaciones, tuvo que regularizar su situación en España, hasta encontrar trabajo y una persona que le alquiló su vivienda. A pesar de todo, Yanik ha calificado la experiencia como muy positiva.
La campaña ha tenido un coste de 9.000 euros y ha sido realizada por una mesa de trabajo financiada por el Ayuntamiento en colaboración con varias asociaciones tales como Atalaya, Accem, Burgos Acoge, Plataforma Burgos con las personas refugiadas, Cáritas, UT Coordinadora de ONGs, Cruz Roja, Fundación Entreculturas y ONG Intermón.