Los grupos de la oposición «no han aprendido nada» tras dos años de trabajo

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El Partido Popular lamenta que los grupos de la oposición “no hayan aprendido nada” después de dos años de trabajo de la Comisión de Investigación del Hospital de Burgos

Lamentan asimismo, que “los argumentos empleados en sus conclusiones por la Comisión sean exactamente los mismos que antes del inicio de la misma, cuando los 63 comparecientes y los miles de folios de documentación contradicen claramente su propuesta de conclusiones”

El portavoz del Grupo Popular en la Comisión, Ángel Ibáñez, critica asimismo que “la demagogia y la mentira siga siendo la principal estrategia de los grupos de la oposición en relación con un Hospital público magnífico como es el HUBU”

Ante la propuesta de conclusiones presentadas por los grupos de la oposición en relación con la Comisión del Hospital de Burgos, el Grupo Parlamentario Popular manifiesta “su incredulidad al comprobar que se siguen sosteniendo falacias y mentiras” en todos los ámbitos analizados, como los costes globales del proyecto, la tramitación de todo el expediente y las ventajas objetivas que ha supuesto la aplicación del modelo para la puesta en marcha de un Hospital moderno, eficiente y que ha supuesto un antes y un después en la mejora de la calidad asistencial de todos los burgaleses y demás personas que allí acuden de otras poblaciones o provincias.

Acceso a toda la documentación requerida

Ante afirmaciones como que el Hospital está privatizado, el portavoz Popular de la Comisión, el burgalés Ángel Ibáñez se pregunta “cómo no se les cae la cara de vergüenza en seguir sosteniendo esa mentira, si cualquiera que acude al Hospital puede ver que la atención y la gestión asistencial es 100% pública, y que son solo servicios accesorios –limpieza, seguridad, hostelería, etc- los que son prestados por empresas privadas – como ocurre en la mayoría del resto de hospitales de la Comunidad”.

Llama también la atención del Grupo Popular que se sigan utilizando términos como el “oscurantismo” del expediente, cuando la oposición ha tenido acceso a toda la documentación que han requerido, sin que se les haya negado el acceso a uno solo de los miles de folios que han formado parte del trabajo de la comisión. “Pareciera que no se han leído los papeles y que su trabajo en la Comisión ha sido puro postureo” ha aseverado Ibáñez.

“Sospechas de irregularidades” 

Respecto a las “sospechas de irregularidades” en cuanto a les gestión del expediente y de los modificados, Ibáñez se ha mostrado especialmente crítico, por cuanto ha afirmado que “si los servicios jurídicos de la Junta, el  Consejo Consultivo de Castilla y León, y el propio Tribunal de Cuentas han acreditado que todo el expediente se ajusta a derecho, hablar de presuntas irregularidades solo puede deberse a una gran ignorancia o a unas importantes dosis de mala fe”. En cualquier caso, anima a los grupos de la oposición a que si entienden que ha habido algún ilícito, “acudan inmediatamente a ponerlo en conocimiento de los órganos oportunos, y hoy antes que mañana”, porque si no estarán demostrando que esas declaraciones son simplemente una “cortina de humo” para tapar su incompetencia a la hora de trabajar en el seno de la Comisión.

El hospital de Alzira ahora funciona peor

Por último, el procurador burgalés ha puesto de manifiesto que resulta curioso que en su última visita a la Comunidad de Valencia, Luis Tudanca, Secretario de los socialistas de Castilla y León no se hay enterado de que el único Hospital que se ha revertido -concretamente el de Alzira-, ahora, y en palabra de sus gestores “funciona peor, ha requerido contratar a 480 profesionales más para hacer lo mismo que hacía antes, ha incrementado las listas de espera, y está resultando más caro para las arcas públicas”.

Ante ese panorama y los informes de la Sindicatura de Cuentas valenciana que desaconsejan al gobierno del socialista Ximo Puig continuar con las reversiones, y acreditan que este tipo de modelos de colaboración público-privada resultan más beneficiosos por sus mayores ratios de satisfacción, su eficiencia en la gestión y unos ahorros de hasta el 30% en los costes de servicios no asistenciales respecto a otros hospitales de gestión pública, Ibáñez se pregunta “hasta cuándo Tudanca va a seguir insistiendo en algo que además de imposible, sería perjudicial para los burgaleses” y que ya ni sus compañeros socialistas están haciendo en otros lugares donde gobiernan. “Sería mejor que dejara de mentir a todos de una vez”, aseveró.

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