Desarticulan un grupo de grafiteros, con residencia en Burgos, por pintadas en trenes
La Comisaría Provincial de Burgos junto con la Brigada Móvil Central han desarticulado un grupo itinerante de grafiteros autor de 264 delitos de daños por pintadas en trenes en el norte de España
La Comisaría Provincial de Burgos junto con la Brigada Móvil Central han desarticulado un grupo itinerante de grafiteros con residencia en Burgos, que actuaban de manera reiterada y sistemática pintando grafitis en trenes de Renfe en las distintas localidades del norte de España, realizando los grafitis con firmas o TAG (graffitis o pintadas callejeras que consisten en la escritura de mensajes o nombre, generalmente la firma del autor del graffiti, mediante letras con estilo propio).
La investigación se inició en junio de 2018 consiguiendo identificar a los autores de estos grafitis. En una primera fase de la operación, llevada a cabo el 16/10/2018 de forma simultánea en varios domicilios de los investigados, se consiguió localizar y detener a 11 integrantes del grupo o crew de grafiteros, nueve de ellos detenidos en Burgos, uno en Vitoria y otro en Zaragoza.En una segunda fase de la operación llevada a cabo entre los días 29 y 30 de octubre se localiza y se detiene a 6 individuos en Burgos.
Se ha conseguido acreditar a los integrantes de este grupo la autoría de 264 delitos de daños por grafitis cometidos en distintos trenes y vagones de la empresa Renfe Operadora, en las siguientes localidades: Burgos, Miranda de Ebro, Valladolid, Medina del Campo, Salamanca, León, Santander, Asturias, Navarra, Vizcaya, Guipúzcoa, daños valorados en valorados en 1.389.075´56 euros.
La reincidencia en la consumación de hechos delictivos similares de este grupo criminal se acredita por las detenciones por delitos de daños anteriores, así como la publicación de estos grafitis en sus perfiles de las redes sociales, buscando el reconocimiento del resto de grafiteros, cometiendo dichos delitos con total impunidad, jactándose de ello en las redes sociales.
Esta trayectoria criminal es sistemática y con una proyección de futuro, lo que indica que este grupo criminal continuará con la comisión de estos delitos, al hacer de esta actividad criminal «una forma de vida». Utilizan la red ferroviaria (Metro y Renfe) como campo de actuación para llevar a cabo tales hechos, creando gran alarma social entre los usuarios del transporte público, en este punto señalar la enorme itinerancia delincuencial de los detenidos, que se desplazan por todo el norte de España, siendo un elemento que dificulta su identificación y persecución de estos delitos, debido al reparto judicial de las denuncias por actuar en distintas demarcaciones judiciales.
No solo acaba en España su actividad delictiva, sino que todos ellos, tal como se acredita por sus redes sociales, han realizado grafitis en trenes de países europeos. El perjuicio económico que supone queda reflejado en las denuncias interpuestas por la empresa Renfe, los peritajes y valoración de daños alcanzado un importe muy elevado.
Modus operandi
1- Los detenidos realizan estudios previos, adoptan grandes medidas de seguridad, comprobando si existe presencia de vigilantes de seguridad y dispositivos técnicos de vigilancia en los lugares donde van a realizar sus acciones o misiones.
2- Para acceder a las instalaciones, finales de vía, talleres o cocheras ocasionan daños en verjas perimetrales de seguridad, puertas de acceso y/o tejados para acceder donde se encuentran los trenes a grafitear.
3.- Procuran actuar en lugares fuera del alcance de las cámaras de vigilancia o durante la noche y cuando no tienen más remedio que exponerse a ser captados por alguna de ellas ocultan su rostro por medio de gorros, bufandas, verduguillos tipo militar, etc., con el único objeto de no ser reconocidos y así eludir la acción de la justicia, por lo que resulta muy difícil su identificación.
4.- Para realizar una pintada misión suelen ir varios integrantes del grupo, más otros grafiteros.
5.- Existe un reparto de tareas durante la ejecución: entre un mínimo de cuatro y hasta veinte grafiteros realizan las pintadas en el tren formando una hilera para distribuirse a lo largo de todo el convoy, dos o tres vigilan y otros dos o tres graban con cámaras fotográficas o teléfono móvil los grafitis realizados para luego difundirlas en internet y redes sociales, teniendo preestablecido un lugar de fácil huida en caso de ser sorprendidos.
6.- En ocasiones se muestran violentos, tiran piedras contra los trenes, con el fin de atemorizar e intimidar a empleados, vigilantes de seguridad y pasajeros para evitar que les reconozcan o les graben con teléfonos móviles.
