El HUBU incorpora el robot Da Vinci, el sistema quirúrgico más avanzado y mínimamente invasivo del mercado
La plataforma se ha instalado en el quirófano E del Hospital Universitario de Burgos y estará en funcionamiento en menos de un mes. El sistema, idóneo en cirugías con un alto grado de complejidad, se aplica en urología, cirugía general, ginecología, otorrinolaringología y cirugía pediátrica. Esta nueva adquisición completa el elevado nivel de equipamiento en alta tecnología con el que cuenta en la actualidad el HUBU.
El Hospital Universitario de Burgos (HUBU) acaba de reforzar su equipo tecnológico con la adquisición y puesta en funcionamiento del sistema X Da Vinci, que ofrece a los cirujanos un acceso más fácil a anatomías complicadas y que mejorará los resultados, precisión y seguridad de la actividad quirúrgica. Este sistema, demandado por los profesionales y la dirección del centro, supone una importante inversión en tecnología y calidad asistencial.
El robot Da Vinci se ha instalado en el Bloque Quirúrgico E del HUBU y, tras un periodo de formación de los cirujanos de las diferentes especialidades, entrará en funcionamiento en breve espacio de tiempo. Con esta nueva adquisición, el HUBU se posiciona como uno de los hospitales públicos de la comunidad con un elevado porcentaje de equipamiento de alta tecnología en la actualidad.
El sistema robótico Da Vinci es la plataforma más innovadora que existe en la actualidad para cirugía mínimamente invasiva y ya está presente en 43 hospitales españoles para realizar principalmente cirugías urológicas, de ginecología oncológica, cirugía general, otorrinolaringología y cirugía pediátrica.
Con el robot Da Vinci, el cirujano no opera directamente sobre el paciente, sino que lo hace sentado en una consola desde donde maneja virtualmente los brazos del robot quirúrgico. La visión en tres dimensiones con un aumento de hasta diez veces, permite trabajar con una gran precisión y llegar a zonas de difícil acceso.
Estas ventajas repercuten de forma directa en el paciente ya que el tamaño de las incisiones es claramente menor, lo que deriva en un mejor y más corto periodo post-operatorio, menos dolor, menos posibilidades de complicaciones y una recuperación más rápida.
Cómo funciona
El sistema Da Vinci consta de tres componentes: la consola quirúrgica, el carro del paciente y la torre de visión.
Mediante la consola el cirujano controla el endoscopio 3D que muestra una imagen tridimensional del campo operatorio y los instrumentos. El carro del paciente se compone de cuatro brazos destinados a soportar el instrumental quirúrgico y el endoscopio. En la parte posterior, dispone de un teclado táctil y los mandos para la selección de la tipología de intervención, en función de la cual se posicionarán automáticamente los brazos. Y, finalmente, la torre de visión contiene la unidad central de elaboración y procesamiento de la imagen a través de un monitor de pantalla táctil de 24 pulgadas, un electrobisturí y un sistema de video en alta definición.