Aitana Arce: «No somos ni regalitos de Dios ni bichos raros»
Aitana Arce, del colegio Blanca de Castilla, leía su relato, «La magia de Aitana», premiado en el XXVIII Certamen de Cuentos «Las Candelas»
En el Día Mundial del Síndrome de Down, En Centro Estela de Down Burgos ha querido celebrarlo de una manera muy especial. Aitana, una niña de 4º de Primaria que asiste al colegio Blanca de Castilla, leía su relato premiado en el XXVIII Certamen de Cuentos «Las Candelas» en el Salón de Plenos del Ayuntamiento ante el alcalde de Burgos, Javier Lacalle y un numeroso grupo de niños del colegio Niño Jesús que visitaban el Ayuntamiento. Acompañaban a Aitana, sus padres y el director de la Asociación Down Burgos, Luis Mayoral.
«La magia de Aitana» cuenta los deseos de la propia Aitana de ser policía y las dificultades que se presentan por ser una niña que hace las cosas «un poco más lentas» que el resto. Pero un hada madrina le concede un deseo, el que todo vaya un poco más despacio, y el mundo encajaba mejor con Aitana además de que al hacer todo más despacio «la gente era mucho más feliz». El relato «es mi vida», aseguraba Aitana.
Para Aitana ha sido un día muy especial. Primero, demostrando a todos lo buena escritora que es, y después, atendiendo a los medios como toda una profesional, con un desparpajo que muchos quisieran. Aitana ha contestado a todo lo que se le ha preguntado, ha posado para las fotos y se ha mostrado con un felicidad radiante sabiendo que era la protagonista indiscutible de la mañana y dejaba claro que «no somos ni regalitos de Dios ni bichos raros». Además «ruborizaba» al alcalde al decirle «Javier Lacalle es una pasada».
Reivindicaciones
El presidente de la Asociación Down Burgos, Luis Mayoral, volvía a reivindicar equipos para valorar las distintas situaciones y necesidades de estos chavales, y sobre todo «que se les pregunte a ellos y a sus familias» sobre qué es lo que quieren para ellos. Importante también es el cambio de etapa, los pasos de las etapas de 0 a 3 y el paso al segundo ciclo de infantil, al que pasan por edad, aunque a veces, se debería esperar y que niños sobre todo nacidos a final de año y la dificultad añadida de tener Síndrome de Down, esperen un año más a dar el salto a este segundo ciclo.
El empleo es otro de los «toques» que da Luis Mayoral, un empleo estable en las empresas, con diversidad, «que es buena». La Asociación Down Burgos tiene 26 chavales en formación y 12 trabajando, a los que se incorporará uno más en breve.
Es necesario, como apuntaba Mayoral, que estas personas tengan su lugar en el mundo y en su ciudad, que se cuente con ellos, «porque es un problema de entendimiento que se despeja en las distancias cortas». «Son diferentes, pero no extraños» y la diversidad es buena para una sociedad que «no es plana». Y es necesario que chavales como Aitana tengan su lugar en el mundo.
Desde Down Burgos se trabaja con 80 familias. Más de la mitad de estos chavales están escolarizados en colegios