Herrera afirma que Castilla y León no puede perder el tren de la Economía 4.0 que traerá nuevos modelos empresariales y nuevas profesiones
El presidente de la Junta de Castilla y León ha inaugurado hoy la conferencia tripartita ‘El futuro del trabajo que queremos en Castilla y León’, donde ha analizado los retos a los que se enfrenta la economía y el mercado de trabajo de la Comunidad. Entre ellos los efectos que tendrá la llamada Economía 4.0 en todos los sectores y especialmente en el medio rural, donde ha apostado por conseguir que lleguen plenamente todas las ventajas de esta nueva revolución industrial y tecnológica.
Durante su intervención en la conferencia sobre ‘El futuro del trabajo que queremos en Castilla y León’, organizada por la Organización Internacional del Trabajo (OIT) y el Consejo del Diálogo Social, el presidente de la Junta de Castilla y León, Juan Vicente Herrera, ha destacado que en la actualidad el mercado laboral se enfrenta a la llamada cuarta revolución industrial: la revolución de la Economía 4.0, que conllevará la creación de nuevos modelos empresariales, nuevas profesiones y la necesidad de un nuevo capital humano. En este sentido, ha señalado que ni España ni Castilla y León pueden ‘perder el tren’ de la Economía 4.0, para lo que la Junta ya está trabajando en dos grandes aspectos. Por un lado apoyando la adaptación de las empresas a esta revolución tecnológica, y ayudando a que el conjunto del tejido productivo incorpore esas tecnologías en sus propios procesos de producción y comercialización, algo que se lleva a cabo a través del Plan de Industria 4.0, enmarcado en la Estrategia de Emprendimiento, Innovación y Autónomos de Castilla y León.
Y en segundo lugar, adaptando también a esa Economía 4.0 el Sistema Educativo y las políticas de Formación para el Empleo. En el primer caso, Castilla y León ya parte con una buena base, con excelentes resultados en los sucesivos Informes PISA, aunque Herrera ha afirmado que hay que seguir apostando por la Formación Dual, mientras que, en el ámbito universitario, serán necesarios nuevos pactos de titulaciones como los firmados en esta Legislatura, así como ampliar los logros ya obtenidos en materia de transferencia del conocimiento Universidad-Empresa.
En cuanto a la Formación para el Empleo, el presidente de la Junta ha destacado el acuerdo suscrito en el Diálogo Social, cuyo objeto es desarrollar una norma reguladora de esta materia sobre la que se sentarán las primeras bases para esa adaptación de la Formación para el Empleo a la Economía 4.0.
Herrera también ha explicado que otro de los cambios a los que se enfrenta Castilla y León y el conjunto de España es el de la transición hacia una economía más sostenible. En esa transición, Castilla y León es una de las comunidades que más contribuye en Europa a la lucha contra el cambio climático, por su liderazgo en la producción de energías renovables (22% de España) y en sumideros de carbono (20% de España). Pero además de “decidida”, el presidente ha asegurado que esa transición “debe ser justa”, en el sentido de apostar firmemente por las nuevas energías, pero no olvidar las necesidades sociales y laborales de comarcas completas que todavía dependen de la minería y del carbón.
También en los recientes acuerdos del Diálogo Social se ha tenido en cuenta, de manera novedosa, esta transición justa frente al cambio climático, lo cual conllevará informar y formar al tejido empresarial de la Comunidad, y facilitarle un adecuado asesoramiento en materia medioambiental. Según ha señalado el presidente, sin duda el trabajo del futuro deberá enmarcarse en condiciones productivas de mayor sostenibilidad, y con mucha mayor importancia de la llamada Economía Circular y Economía Verde.
Mundo rural
Esta nueva revolución industrial va a afectar especialmente al mundo rural, tan esencial para Castilla y León, mejorando los cultivos y la industria agroalimentaria, y permitiendo productos mucho más adaptados a los deseos de los consumidores, algo a lo que contribuirán las políticas de la Junta en materia de I+D+i. Pero además, el presidente ha subrayado que también hay que conseguir que lleguen plenamente al medio rural las ventajas de la tercera revolución industrial. Para ello, la Junta lleva desde 2002 impulsando la extensión y mejora de la banda ancha.
En segundo lugar, hay que seguir profundizando en la diversificación de actividades económicas en el medio rural, con el objetivo de que el empleo pueda surgir en torno a los recursos endógenos del propio medio rural, como son: el sector forestal, el del patrimonio natural y cultural, el turismo, los proyectos de energías limpias, etc. Por ello, Herrera ha valorado como un acierto la reorientación que desde el Diálogo Social se ha dado en estos últimos años al Plan de Empleo Local, como herramienta de dinamización de los pequeños municipios rurales.
En cuanto a los retos demográficos, Herrera ha destacado que los problemas de despoblación que sufre toda Europa se van a ver agravados por el imparable proceso de envejecimiento de la población. En este sentido se ha referido al debate sobre la sostenibilidad del sistema de pensiones, ya que a pesar del aumento de lo recaudado por cotizaciones (cuya cifra más alta se obtuvo en 2017), el aumento aún mayor del número de beneficiarios supone uno de los principales retos a los que hoy se enfrenta en España, y constituye “una materia en la que el diálogo y el acuerdo son absolutamente imprescindibles”.
No obstante, el presidente ha afirmado que el envejecimiento de la población presenta también algunas oportunidades que se deben aprovechar, como ya se ponía de manifiesto en el Dictamen sobre demografía defendido ante el Comité de las Regiones de Europa, en el que se hablaba de la necesidad de aprovechar las oportunidades de la ‘economía de plata’. Según ha destacado Herrera, eso es algo que ya se está haciendo en Castilla y León, que actualmente es la Comunidad que más empleo genera en Atención a la Dependencia: 50 empleos por cada millón de euros de gasto, frente a una media nacional de menos de 35, gracias a una apuesta por los servicios profesionales, apoyada por el Diálogo Social. “Es un ejemplo de cómo servicios públicos muy intensivos en capital humano —Sanidad, Educación, Servicios Sociales— pueden contribuir también a ese futuro del trabajo que queremos”, ha señalado Herrera.
Asimismo, y en cuanto a la disminución del número de jóvenes, el presidente de la Junta ha apostado por trabajar con la visión de futuro de un nuevo sistema público de protección que se sume a los hasta ahora existentes, destinado a la Conciliación de la Vida Familiar y Laboral. Así, ha destacado la necesidad de poner en marcha en España un Sistema de Conciliación que cree puestos de trabajo para jóvenes, que ayude a las familias jóvenes en el momento de más dificultad en la crianza de sus hijos, que genere retornos a las arcas públicas, y que actúe sobre el que es uno de los principales factores de la brecha laboral y salarial entre mujeres y hombres. En Castilla y León ya se están dando los primeros pasos hacia ello, a través de un reciente acuerdo del Diálogo Social en el que se ha pactado el texto del futuro Proyecto de Ley de Medidas para el Fomento de la Conciliación.
Todos estos nuevos retos y políticas deberán seguir siendo consensuadas al igual que lo han sido hasta ahora las grandes líneas en materia económica e industrial, puesto que el Diálogo Social ha demostrado ser muy eficaz a la hora de mejorar la competitividad de las empresas, la situación de los trabajadores y los propios sistemas de protección social. “Y que por tanto ese Diálogo Social deberá seguir siendo una parte esencial del futuro del trabajo que queremos en Castilla y León”, ha subrayado el presidente.
Cuatro conversaciones para el trabajo del futuro
Durante la sesión inaugural de la primera conferencia tripartita, ‘El futuro del trabajo que queremos en Castilla y León’ organizada conjuntamente por el Consejo del Diálogo Social de la Comunidad y la OIT, los participantes han expuesto el avance en el modelo del Diálogo Social de Castilla y León, que impulsado desde hace más de 17 años, y con casi 100 acuerdos, se ha constituido como un modelo de concertación social y económica para otros territorios que tienen como objetivo mejorar la distribución de la riqueza y la justicia social.
La OIT reconoce el impulso de Castilla y León a su modelo de Diálogo Social con la celebración de esta jornada, tras la presentación realizada en la sede de la OIT en Ginebra del Diálogo Social de la Comunidad, el pasado 19 de febrero. La Jornada se ha estructurado la jornada en cuatro mesas denominadas Conversaciones.